El homenaje que merecen

Elsie Carbó
grillosazules@gmail.com

Yisel Marrero es una joven protectora muy activa en las redes sociales y en el accionar concreto con los animales abandonados o necesitados de ayuda, por eso a través de ella he querido también hacer el homenaje que se merecen quienes ayudan o colaboran directamente en esta labor de protección. Son muchas y muchos los que desinteresadamente se han unido entre sí o forman parte de asociaciones o grupos en el país que defienden el derecho de los animales a vivir con bienestar, lo que indica que cada vez hay más personas que ganan conciencia y empiezan a actuar con sentido humanitario y altruista, tan necesario en la sociedad que queremos para hoy y el mañana también. De lo último publicado por Yisel es este texto que rinde un homenaje sincero a esas protectoras que hoy, con increíbles sacrificios, hacen la diferencia.

Dice Yisel:

“Querido grupo, hoy quiero presentarle a esta gran protectora de animales y de la cual han leído en las publicaciones de Iliana Viamonte, de CEDA (Cubanos en Defensa de los Animales y mías. Pues sí, ella es Maylin, técnica en veterinaria que lleva con sus esfuerzos, con la ayuda de varias personas amantes de los animales y sobre todo, con mucho amor, un refugio donde ya tiene aproximadamente 30 animalitos.

En su refugio hoy están rehabilitándose Lily-Boo, la perrita de la historia que recientemente les conté, también los 4 cachorros y su mamá, recogidos por Iliana y Nathalie en el Reparto Koly, una perrita que está muy enferma pues fue abandonada viejita con un tumor y tuvo que ser intervenida rápidamente, ella fue recientemente reportada por CEDA, y recogida por Odalis Jaramillo Arabí, además, 4 de los 6 cachorros que dejaron a su suerte en la clínica Carlos III y 6 cachorritos más, que fueron abandonados con los ojitos aún cerrados y que Iliana y Maylin encontraron cerca de su casa en el Cotorro, y hasta donde da mi memoria, también se encuentra una perrita reportada abandonada y en malas condiciones de salud, en Mantilla. Esto es a grandes rasgos.

La realidad es que Maylin no se niega a ninguna petición que se le hace para rehabilitar a un animalito abandonado. Con pena le pedimos que asumiera a Lily-Boo y ella sin dudarlo dijo "tráela para acá, Iliana". Maylin es una persona humilde, madre de 2 hijos, esposa y protectora, que divide su tiempo entre todas esas funciones. Ella limpia su refugio, cocina la comida para sus animales, cura, inyecta, y ofrece cariño a todos los que están bajos sus cuidados.”

Para terminar Yisel además solicita colaboración para esta protectora con esas cosas que a veces una tiene en casa y no necesita de momento, como pueden ser los útiles de limpieza: detergente, escobas, frazadas de piso, sábanas o trapos para que los peluditos duerman. También alimentos de todo tipo, como arroz, boniato, picadillo de pollo, vísceras, etc. Medicamentos indispensables como el Yodo, la violeta de genciana, polivit, ácído fólico, labiomec u otro que contenga ivermectina, pastillas para desparasitar, pipetas para la desparasitación externa, antibióticos, gasa, torundas y todo lo que pueda contribuir al bienestar de los animales refugiados.

Ahora les voy a presentar a Iliana Viamontes, otra de las protectoras rescatistas que merece también el reconocimiento y el respeto por su labor y sacrificio en este terren, en el que aún queda mucho por hacer, pero por suerte, como ella hay muchas más en Cuba.

Dice Iliana:

“Mi labor siempre ha sido individual, no pertenezco a ningún grupo, solo al amor que siento por los animales, siempre los he ayudado desde que era niña, ahora gracias a internet he conocido a tantas personas igual que yo a las cuales les tengo una admiración tremenda, incluyéndola a usted, pienso que ser protectora es darlo todo a cambio de nada material; muchos te critican y me preguntan y qué ganas, pero mi respuesta siempre es la misma, la satisfacción de cambiar la triste vida de un ser que igual que nosotros siente hambre, sed y frío. Cada vez que rescato un animal enfermo o abandonado y veo como evoluciona y sobrevive eso me hace sentirme enormemente feliz, eso lo estoy viviendo con el perro al que le llamo Tareco, el sarnosito, que tengo ubicado en el Cotorro, en el refugio de esa gran protectora que se llama Maylín, ese perrito se recostaba a las paredes del hambre y la sarna que lo estaba matando, y hoy en solo un mes de tratamiento su alegría es tan importante para mí, pues yo le ofrecí la oportunidad de vivir y él en cambio me paga con amor, quieres algo que alimente más el alma que ese sentimiento?

En mi casa está de más contarte los problemas que mi labor de rescate me trae con mi esposo, con el trabajo y mis hijos, a veces hasta me critican porque dicen que le quito tiempo de atenderlos a ellos pero yo los convenzo explicándole que los animalitos abandonados solo tienen a las personas como yo, y que no somos muchos y, entre disgusto y disgusto los convenzo. Anécdotas tengo muchas pero la que más me golpeo el corazón fue cuando rescate a una mamá con sus bebés en zoonosis, porque una persona, si así se puede considerar, llamó al carro de recogida de animales solo porque la perra, como madre vigilante se le tiraba a todo el que iba a tocar a sus cachorros, pero fui con mi compañera de trabajo y la recogimos a ella y sus tres bebés, ya que el cuarto había muerto cuando lo tiraron al carro.

Llegamos a ese lugar horrible, a ese campo de concentración que es zoonosis, y la alegría de ese animal fue tan grande que yo y mi compañera de trabajo nos echamos a llorar, lástima que esos individuos que trabajan ahí no permiten tirar fotos ni video, por eso no pudimos compartir tan hermoso momento, pero esta historia tuvo un final muy triste ya que la perra y sus bebés se contaminaron de moquillo, enfermedad horrible que los llevo a la muerte. De la labor que se hace en el país me parece buena pero se necesita hacer más y sobre todos unirnos más personas a esta lucha, somos pocos para tantos animales abandonados y enfermos. Las jornadas de concientización me parecen buenas pero prefiero la acción, sin criticar a nadie en especial, como bien dijo el che" hacer dos y hablar uno" eso sería lo ideal, para esta lucha queda mucho por hacer y seguir luchando por esa ley que tanto esperamos todos los protectores de animales, una ley que los proteja del maltrato y que haga pagar bien duro a los que abusan de ellos sin piedad, ese día tiene que llegar por ellos, y por todos los que los amamos incondicionalmente.”