La TÓRTOLA TURCA (Streptopelia decaocto) es otro de los pájaros abundantes en El Terrao. Hay muchas y son buenas compañeras de paseos. En Badajoz existen en buen número, incluso en parques y jardines urbanos. Cada vez hay más, desplazando en gran medida a la tórtola común (Streptopelia turtur). Es una especie procedente de Asia Menor, su área originaria de cría. Su espectacular difusión hacia el este y el oeste de esa zona comenzó según está datado hacia los años 30 del pasado siglo XX. Es un fenómeno inusual, sobre todo tratándose de una especie no migradora.
Es un ave muy bonita. En su plumaje predominan los tonos arena. Presenta una ancha franja terminal blanca en la cola. Particularmente distintiva es la estrecha franja negra del cuello, finamente bordeada de blanco que no está presente en los inmaduros.
En vuelo, destacan sobremanera las oscuras primarias alares, en contraste con el resto del cuerpo, de tonalidad francamente clara.
Normalmente se la ve en parejas, pero en época que no esté criando, aparece en pequeñas bandas, sobre todo compuestas por ejemplares jóvenes. Alborotan mucho en primavera y verano. Expulsan de las proximidades del nido a otros ejemplares e, incluso, a urracas.
Son bastante mansas, acuden gustosas a comederos artificiales o a lugares donde se les proporcione comida con regularidad. Es normal que se junten con palomas y otras aves domésticas, así como con bandadas de pajarillos silvestres que coman en el suelo. Su alimentación es fundamentalmente granívora.
En El Terrao anidan y crían en los tres grandes pinos piñoneros que tenemos cerca de la casa. Los nidos son muy simples, unos cuantos palitos cruzados en una horqueta de una rama son suficientes para la puesta que, usualmente, consta de dos huevos blancos. Se pueden ver al trasluz desde abajo.
Este año, una de las nidadas ha fracasado, seguramente por la intervención de algún depredador, una gineta o algún gato, o incluso una rata. El caso es que huevos y pollitos recién nacidos terminarosn en el suelo en medio de una nube de plumitas.
Una lástima, pero en la naturaleza no se desperdicia nada, todo se recicla. En este caso son las avispas las primeras en acudir y aprovechar los restos de huevo y los pequeños cadáveres.
Luego vendrán las moscas y moscardas, y las hormigas. También las urracas se llevarán su ración y algunas mariposas aprovecharán los pocos fluídos disponibles. Pronto, las tórtolas de nuestro pino volvieron a anidar y sacar adelante una nueva pollada.
Estos animales tan bellos recuerdan mucho a las palomas, de hecho, son de la misma familia, y se reúnen a menudo para picotear en el suelo. Se acostumbran fácilmente a la presencia humana. En El Terrao permanecen durante todo el año. No molestan y nos acompañan y alegran la vida con sus vuelos y sus arrullos.
(Todas las fotografías son originales de RAFAEL RODRÍGUEZ).
Fuente: este post proviene de MªÁngeles Carbonell Ruiz, donde puedes consultar el contenido original.
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