Un perro y el baguette



A quien no se le antoja un rico pan, mira a este tierno perrito que al ver el baguette no ha resistido la tentación y ha ido por uno para colocarlo dentro de su casita, pero ¡ups! Es tan grande el pan que no entra por la puerta, pero él después de tomarse su buen tiempo,  decide que él primero debe de entrar y jalar el pan, y por fin… puede comérselo.


 
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Modificado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Recomendamos