Con el buen tiempo empieza la época de alergias estacionales, rascado, prurito... Si tu perro o gato se rasca más de la cuenta, lo más importante que debes hacer es visitar a tu veterinario para que te ayude a que el problema no vaya a peor, y descartar que haya pulgas dando la lata por ahí...
Combinado al tratamiento que te proponga tu veterinario, puedes usar herramientas naturales complementarias:
1) Apoyo a la alimentación: la revisión de la dieta del animal y el cambio de dicha dieta, o bien la suplementación con complementos naturales que refuercen el organismo de nuestro compañero es algo que muchas personas obvian. Es mucho más importante de lo que crees revisar con un veterinario experto en nutrición natural la alimentación de tu mascota, pues a veces con los cambios adecuados en la alimentación, conseguimos que el tratamiento veterinario por fin funcione y así se vaya sanando el cuerpo del animal.
2) EFT y Reiki: terapias manuales que calmen el estado nervioso del animal que se rasca son importantes para el bienestar del animal y para frenar su ímpetu/obsesión por el lamido constante o el rascado. Existen múltiples terapias manuales que relajan todo el organismo y que además aportan la posibilidad de enfocar el tratamiento hacia un problema en concreto. El Reiki nos permite enfocar el tratamiento hacia la mejora de su alergia, así como dar fuerza al tratamiento veterinario que ya se le esté dando al paciente. El tapping (EFT) nos ayuda a desbloquear la parte emocional de la enfermedad (en este caso nos ayuda a frenar la obsesión por el rascado e ir hacia la causa emocional del problema desbloqueándola). Ambas herramientas pueden realizarse en combinación con cualquier tratamiento, haciendo que el resultado del tratamiento veterinario mejore, sobre todo en casos crónicos.
3) Flores de Bach: las esencias florales administradas oralmente en gotas, o bien en crema sobre las heridas del animal, también hacen sinergia con cualquier otra acción que se esté realizando para recuperar la salud del paciente. Estas esencias, además de tener efectos similares a las técnicas del punto 2, también impulsan el sistema inmunitario. Gracias al conocimiento del animal y su problema, elegiremos las esencias florales que él necesite tanto por el problema físico que muestra como para el estrés, nerviosismo, frustración, etc que esté viviendo. El apoyar la disminución del estrés de forma individualizada (pues cada animal vive la situación de una manera), conseguimos que, al bajar el estrés, el sistema inmunitario se vaya recuperando poco a poco, sistema totalmente implicado en el problema de las alergias, hipersensibilidades, etc.
De esta forma, con complementos naturales al tratamiento convencional, podemos conseguir que un animal que cada año se rasca, vaya dejando en el olvido las alergias!
Más información y recomendaciones caseras: Mi perro se rasca.
Mercè Giménez
Vida Natural Animal, aprender a darles bienestar es posible.
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