Los ladridos son un problema que afecta al animal y a todos los que conviven con él. Por un lado sufrimos intentando saber qué es lo que hace que tu perro se sienta intranquilo y ladre y por otro nos inquieta estar molestando al vecindario, pero tranquilos, todo tiene solución.
Las principales causas del ladrido excesivo en perros, son las siguientes:
Estrés Si las necesidades de tu perro no se encuentran cubiertas al 100% puede que tu perro ladre para expresarte sus carencias. El ladrido es para el perro una forma de comunicación por lo que sólo ladrará si tiene algo que decir. Revisa que las rutinas de paseo, alimentación, libertad y compañía estén cubiertas antes de atribuir el ladrido a otras causas. Si tu perro siente dolor, miedo o incomodidad puede sentir estrés y ladrar para ser atendido.
Soledad Debido al estilo de vida actual, muchos dueños nos vemos obligados a pasar la mayor parte del día fuera de casa y trabajando. Nuestras mascotas sufren las consecuencias de nuestro frenético ritmo de vida. Tu perro detecta tu estrés y estado vital y lo interioriza, así que si sumas esto a todas las horas que pasa solo en casa, tendrás un cocktail explosivo que da lugar a ladridos y más ladridos. Un perro acostumbrado por naturaleza a vivir en manada y poder compartir momentos con otros de su especie, necesita un compañero, ya sea humano o perruno. ¡Ojo! Si no tienes tiempo para dedicarle a un perro, la solución no será incorporar a otro perro a la ecuación ya que puede que éste aprenda el comportamiento desequilibrado del primero y multipliques el problema por 2. Lo suyo es que trates de dedicar más tiempo a tu perro u organices rutinas para pasar tiempo con él. Una vez el problema mejore y el perro sea estable, puedes plantearte buscarle un compañero.
Ansiedad por separación Relacionada estrechamente con las 2 causas anteriores, tenemos la ansiedad por separación, que es sin duda una de las principales causas del ladrido en perros. Tu perro aprende de tus costumbres, por tanto en cuanto ve que sales por la puerta, asocia esto a largos periodos de soledad y miedo. Muchos perros ladran de forma continuada hasta que sus dueños vuelven a casa, tratando de reclamar su presencia. Muchos de los perros que sufren ansiedad por separación, tienden además a mordisquear muebles y objetos o realizar sus necesidades dentro de casa. Todos estos comportamientos pueden darte pistas de un cuadro de estrés por separación y deberás tratar de ponerle remedio. Prueba a salir por periodos cortos de tiempo o simplemente abrir y cerrar la puerta pero sin llegar a irte de casa. Haz como si fueras a salir pero en momentos en los que no tengas pensado hacerlo, así tu perro no se estresará cuando vea que realizas las rutinas previas a la salida. Te costará tiempo modificar estas pautas pero seguro que serán efectivas.
Para combatir la ansiedad por separación, muchos dueños utilizan juguetes interactivos como los KONG que proporcionan entretenimiento durante horas. Los juguetes interactivos suelen contener premios en el interior y suponen un reto para los perros, que disfrutan tratando de tener acceso a la comida.
Otro remedio típico y económico es el dejar prendas con tu olor a disposición del animal para que sienta tu presencia aunque no estés. Muchos dueños dicen que les funciona dejar grabaciones con sus voces mientras el perro está solo, para que se sienta acompañado. Puedes probar encendiendo la TV o la radiocuando te marches, pero si puedes dejar tu voz grabada, créeme que será más efectivo.
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