Cuidados para tu caballo después de montarlo

Después de que termine de montar a caballo tiene un trabajo importante que hacer: desenganchar y cuidar a su caballo. Para mantener a su caballo feliz y saludable desde yeguadadimoba le decimos cómo debe cuidarlo adecuadamente después de su paseo. Asegúrese de que beba suficiente agua para limpiar su tachuela, cada parte de este proceso de desenganche es absolutamente esencial.



Pasea a tu caballo. Mientras esté montado, camine de diez a quince minutos con las riendas sueltas al final de su viaje. Especialmente, si has estado haciendo galope o saltando, asegúrate de que tu caballo tenga tiempo para enfriar sus músculos.

Igual que los corredores caminan para enfriarse después de una carrera larga, un caballo necesita tiempo para enfriarse antes de dejar de trabajar por completo. Cuando termine de caminar sobre su caballo, él no debería estar respirando pesadamente o aún sudando activamente.
Camina por un sendero o alrededor de la propiedad para que sea más pintoresco y agradable para usted y el caballo.

Desmonta tu caballo. Saca ambos pies de los estribos al mismo tiempo y baja de tu caballo. Enrolla tus estribos. Afloje su circunferencia en uno o dos agujeros. Pon las riendas sobre su cabeza para que puedas guiarlo más fácilmente. Pon tu mano entre las patas delanteras de tu caballo. Si sientes mucho calor o todavía suda activamente, sigue caminando con él. Asegúrate de que el caballo no respire con dificultad. Si ve sudor blanco y espumoso entre las patas delanteras o traseras de su caballo, debes de enjuagarlo antes de quitar la tachuela.

Dale agua a tu caballo. Es un mito que los caballos que acaban de trabajar no pueden beber agua después de un paseo. Un caballo puede perder entre 7 y 15 litros de sudor por hora si hace calor y está trabajando duro, por lo que deberá beber para evitar la deshidratación.

Desencadena tu caballo

Coloca las riendas sobre la cabeza de su caballo, como si fuera a montar de nuevo. Deshaga la banda de la nariz y el pestillo de la garganta. Deslice la brida de su caballo sobre su cabeza. Póngase su cabestro y ponga la brida a un lado para que pueda limpiarla más tarde.

Asegura tu caballo en un granero o en un poste. Si está utilizando ataduras cruzadas, coloque las pequeñas hebillas metálicas de las ataduras cruzadas a cada lado del cabestro del caballo, a través de los lazos metálicos más cercanos a su boca.

- Si lo está amarrando a un poste de enganche, coloque la hebilla de la cuerda de plomo en el lazo del cabestro que se encuentra debajo de las mejillas del caballo. Ata  la cuerda de plomo de forma segura al poste de enganche.

- Asegúrate de que uno de los extremos de los cruces tenga una liberación rápida para ayudar a mantener a su caballo seguro.

Desata tu caballo. Quita la silla de montar, la circunferencia y la almohadilla del caballo. Si no hay una rejilla en el establo, puede colocar el pomo (o la parte delantera) de la silla en el suelo, apoyándola contra una pared. También puedes dejarlo boca abajo. Voltee la almohadilla del sillín para que el sudor pueda comenzar a secarse.

- Asegúrese de que puede acceder fácilmente a su cuerda de plomo. Mantenga su área de aseo limpia y organizada.

Arregla a tu caballo

1.- Localice los suministros de aseo de su caballo. Su caballo debe tener su propio juego de cepillos, que debe incluir un peine de curry, un cepillo rígido, un cepillo suave, una pezuña, una toalla y un raspador de sudor.

2.- Limpia el agua y la sal del cuerpo de tu caballo con un raspador de sudor. Aplicando una presión moderada, mueve el raspador en un movimiento rápido hacia abajo sobre el cuerpo de su caballo para limpiarlo. No presiones demasiado con el raspador o podría lastimar a su caballo.

3.- Usa un peine de curry con movimientos circulares sobre el cuerpo de tu caballo, excepto por su cara y debajo de sus rodillas. Peina su caballo durante, idealmente, diez o quince minutos. El peine de curry extrae polvo, suciedad y sudor que se enreda dentro del pelo del caballo.

4.- Usa un cepillo rígido o duro en la misma área con movimientos cortos para quitar la suciedad de su cuerpo. Cepilla de la nariz a la cola, o con la dirección del cabello. No tengas miedo de ser brusco. Concéntrate especialmente en áreas que están sudorosas o que han tocado la tachuela. Si a tu caballo no le importa, usa el cepillo rígido en su cara, especialmente alrededor de las orejas, que estará sudado por la brida.

5.- Usa un cepillo suave en todo el cuerpo, incluso alrededor de los pies y la cara. Usa una toalla húmeda en la cara si está sudorosa.

6.- Lija sus pezuñas: primero la pezuña delantera izquierda del caballo, luego la pezuña trasera izquierda, luego la pezuña derecha trasera, luego la pezuña delantera derecha. Asegúrate de que no haya rocas en sus pies y que no raspe la rana del pie del caballo, que es el triángulo más blando en el medio de su pie. Esta área es sensible. 



7.-  Si su caballo está caliente, sudoroso o aún tiene marcas de sudor en su cuerpo, puede limpiar las áreas de su cuerpo que aún están sudorosas. Es importante sacar todo el sudor de su cuerpo antes de que vuelva a su puesto ¡Imagínese dormir en su propia cama después de haber corrido cuatro millas y no haberse duchado! Después de limpiar las áreas sudorosas de su caballo, usa el raspador de sudor en esas áreas para librar a su caballo del exceso de agua para que se seque más rápido. En lugar de sudar raspando sus piernas, sécalas con una toalla.
Si su caballo solo está ligeramente sudoroso en un par de lugares, sumerja un cepillo rígido en un balde de agua para “cepillarlo”. Con el cepillo mojado, cepilla las partes sudorosas del caballo.

Esto es como un baño en miniatura. Cuando hayas terminado de preparar a tu caballo, no debería haber marcas de sudor en su cuerpo. ¡Debería verse bien cepillado o bien bañado!
También puede aplicar un champú seguro para caballos para ayudar a humectar la piel de su caballo y limpiar el sudor y la suciedad.



8.- Prepara tu caballo para ir a casa. Aplica cualquier medicamento, como medicamento de aftas para los cascos de su caballo, si es necesario.

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Lleva a tu caballo a su sitio

Sujeta la cuerda de plomo a su cabestro y llévalo a su puesto o paddock. Cuando conduces un caballo, debes poner tu mano derecha cerca del extremo de la cuerda de plomo, cerca de la barbilla del caballo, y hacer que tu mano izquierda sostenga el exceso de cuerda de plomo. Sin embargo, no envuelvas la cuerda de plomo alrededor de tus manos. El caballo debe caminar a tu derecha.

Pon tu caballo en su sitio. Cuando entres en su sitio, date la vuelta para que ambos estén frente a la puerta. Quítate el cabestro, sal del sitio y ciérralo. Guarda el cabestro; generalmente hay un gancho justo al lado de la puerta de la cabina. ¡Dale una hierbabuena o una rodaja de manzana para recompensarlo!

Limpia la tachuela de tu caballo, la silla de montar, la circunferencia y la brida con jabón, quitando el sudor o la suciedad. Para hacer esto, toma una esponja, sumérjala en un poco de agua y luego aplica jabón a la esponja. Aplica el jabón en el cuero para que no haya espuma en la silla. [11] El cuero debe verse limpio y suave. Enjuaga y limpia la parte de tu caballo con agua. Vuelva a colocar la tachuela donde corresponde.
 
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Etiquetas: caballoscaballo

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