1. Ornitorrinco
¿Quién iba a decir que este animal tan mono (a la vez que raro) iba a ser peligroso? A este mamífero con patas y pico de pato es mejor que no lo enfademos. El ornitorrinco es bastante agresivo por naturaleza y en sus espolones esconde un veneno que no dudará en utilizar si lo asustas. Ese veneno causa una reacción alérgica de la que todavía no hay un medicamento específico que alivie los efectos.
2. Caracol
¡Este sí que no os lo esperabais! El propio caracol es inofensivo, pero sus babas pueden transmitir un virus muy perjudicial para el ser humano llamado Angiostrongiliasis. Este se puede transmitir por el consumo crudo de este animal, por contaminación del agua o alimentos, o por sus propias mucosidades.
3. Cisne
Por lo general estos animales no suelen atacar. Cuando lo hacen es por instinto, por defender su nido. En 2012 en Estados Unidos, un cisne tiró a un hombre de su kayak a un pequeño lago de un complejo residencial en Des Plaines, a las afueras de Chicago. El hombre trabajaba allí cuidando de las aves. Por si fuera poco, cuando este intentó nadar hacia la orilla el cisne se lo impidió, por lo que murió ahogado.
4. León marino
¿Cómo puede ser agresivo el adorable león marino? Conocido por su inteligencia, este animal puede aprender trucos y relacionarse con ciertos humanos (como sus cuidadores si vive en cautividad), pero también es agresivo con quien no conoce, se acerca demasiado o no le transmite confianza.
5. Búho real
El búho es una gran y preciosa ave, una especie que no es peligrosa por su pico, sino más bien por sus garras. Si viera necesario atacar a un humano porque se sintiera acorralado, lo haría. Mide aproximadamente 1,5 metros y pesa unos 2 kilos, por lo que posee una fuerza más que suficiente para hacer daño (si no le quedara otra opción).
6. Oso hormiguero
Lo del oso hormiguero es bastante gracioso, porque ni siquiera tiene dientes. El problema está en sus garras. Se alimenta de hormigas y termitas, pero para llegar hasta ellas tiene que escavar y romper los hormigueros, para lo que sí necesita una buena herramienta. Si este animal se siente acorralado por un humano no dudará en atacar, es puro instinto.
7. Oso panda
¡Este peluche sí que no podía ser agresivo! Pero lo es (si lo buscan). El oso panda puede llegar a pesar hasta 160 kilos y si se siente amenazado no dudará en utilizar todas sus armas para defenderse. Por muy blandito y achuchable que parezca... ¡No deja de ser un oso!
A partir de ahora, ya sabes: más vale ser respetuoso con todos los animales, que hasta el más inofensivo te puede sorprender.
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