Esta semana sabíamos por boca de Freddy Roach, el entrenador del púgil filipino, que la historia que llevó a Manny a convertirse en boxeador profesional fue profundamente traumática.
La historia de Manny Pacquiao y su perro comienza cuando el perro del boxeador se escapó de casa, éste que tenía entonces 14 años de edad, decidió ir a buscarlo, tarea que le llevó 2 días durante los cuales se ausentó de casa. Tras 2 días Pacquiao volvió a casa con el perro, pero una vez allí, su padre alcohólico, decidió castigar su comportamiento matando y cocinando a su perro para después obligarlo a mirar como se lo comía. Semejante atrocidad hizo que Pacquiao huyese de su casa para jamás regresar, por lo que un perro cambiaría su vida para siempre.
En la calle Paquiao sobrevivió vendiendo donuts 5 céntimos más caros de lo que los compraba y durmiendo en cajas de cartón. La historia Manny Pacquiao y su perro puede conmover a cualquiera y más teniendo en cuenta que ahora no se separa de su perro Pacman,
Muchos dicen que su pequeño perro es su amuleto, siempre entrena junto a él y se lo lleva a cada combate.
¡Yo ya soy del equipo de Pacquiao!
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