Si estás pensando en hacer un viaje y no sabes todavía qué hacer con tu mascota, te ofrecemos varias posibilidades que te ayudarán a solucionar el problema. De acuerdo a tu situación, encontrarás la solución más idónea para ti y para tu mejor amigo.
No siempre es fácil viajar con tu mascota: el tamaño, el tipo de animal, la adaptación del mismo al lugar donde te marchas, además de los inconvenientes existentes en los complejos hoteleros, son sólo algunos de los elementos que te harán dudar sobre cómo plantear tus vacaciones. Te presentamos diferentes alternativas para cada animal de compañía, y para que alejes tus preocupaciones.
Si tu mascota es un perro...
El can es el animal de compañía que más depende de sus dueños: te necesita para que le saques a la calle, le pongas la comida y el agua, y también necesita que estés cerca. Aunque el viaje sea de fin de semana, el perro no es como el gato; no podrás dejarle solo. Si no puedes llevarle contigo, déjale al cuidado de amigos o familiares a quienes el perro conozca y les quiera, pero si esto es imposible, existe la posibilidad de llevarle a residencias caninas en las que él, también pasará unos días de descanso. Aquí le cuidarán muy bien y estará con otros perros.
Si decides llevarle de vacaciones, lo primero que tienes que hacer es informarte de si el hotel o el apartamento al que vas permite la entrada de animales. Documéntate bien porque cada vez son más lugares los que aceptan animales de compañía. Debes saber que, si piensas viajar en coche, la ley te obliga a instalar una barrera física entre el conductor y el lugar donde ubiques a tu mascota. Existe también un arnés especial para perros que se sujeta al cinturón de seguridad del asiento trasero. Otra opción durante el recorrido es que, si tu perro es pequeño, puedes trasladarlo dentro del trasportín.
Aproximadamente cada dos horas de recorrido es conveniente parar en un área de servicio y bajar a tu mascota del habitáculo para que beba agua y haga sus necesidades. Es muy importante que recuerdes no dejar a tu mascota en el interior del coche si decides ausentarte a tomar un café. La temperatura del coche aumenta considerablemente y a 30 ºC tu mascota puede sufrir un golpe de calor de consecuencias letales.
Si tienes que viajar en avión o en tren, cada compañía impondrá unos requisitos para el trasporte del animal. Además, tendrás que presentar el certificado de que lleva puesto el microchip y, por supuesto, la cartilla de las vacunas en regla. Si vas a viajar al extranjero es preciso que te informes bien y con tiempo en las embajadas de cada país ya que, dependiendo del territorio, te exigirán una documentación u otra.
Si tu mascota es un gato...
Los gatos son animales territoriales a los que les cuesta asimilar los cambios de lugar y tardan en adaptarse unas dos semanas aproximadamente. Si vas a irte fuera de casa en vacaciones, la solución a qué hacer con tu mascota estará en los días que vayas a pasar fuera, y por supuesto, si el lugar al que te trasladas admite animales de compañía.
Si tu viaje es de fin de semana, es preferible que tu mascota se quede en casa. Déjale agua y comida para que no le falte y, si tu gato es muy sensible a la suciedad ponle más de una bandeja sanitaria para que se sienta limpio.
Si el viaje es largo, tienes dos opciones: si lo llevas contigo en coche, introdúcelo en un trasportín mientras dure el viaje. Procura dejarlo a su alcance varios días antes para que lo huela y el día de la partida, no le asuste. Cuando llegues al destino tu felino estará desorientado y se esconderá en el lugar que encuentre más seguro, dale tiempo para que se habitúe y vigílale los primeros días.
Pero si tu viaje es al extranjero o vas a un hotel donde no admiten animales, trata de que alguien de tu confianza vaya todos los días a tu casa un rato para estar con el animal. Si esto no es posible, como última solución déjalo en casa de esta persona o llévalo a un hotel para gatos.
Si tu mascota es un ave...
Tienes que tener en cuenta ciertos factores: el tamaño del animal, el lugar al que viajas, la duración de las vacaciones, etc. Las aves pequeñas como el periquito o el canario son más sencillos de trasladar, aún así es posible que tu mascota no se adapte al lugar de destino.
Otra opción es dejarle en casa, siempre y cuando tengas a alguien que se pase a verle cada dos días para revisar el comedero y el bebedero. Si nadie puede ir a verle, trasládale a su casa; si el animal está en su jaula no notará mucho el cambio.
Las aves grandes son las más problemáticas, ya que, por su tamaño, casi nadie las lleva de vacaciones. Son animales que requieren múltiples cuidados, por lo que tendrás que dejarlas en casa de alguien que las sepa cuidar bien. Intenta que tu mascota conozca a las personas con las que se va a quedar para que se sienta más tranquilo. Si por el contrario nadie puede hacerse cargo de tu exótico amigo, existen lugares especializados donde puedes dejar a tu loro durante tu periodo de ausencia.
Si tu mascota es una tortuga...
Disfrutar de una tortuga como animal de compañía no te supondrá ningún problema a la hora de irte de vacaciones. Durante el viaje puedes trasportarla en una caja de cartón o en un recipiente seguro, pero siempre en el que pueda respirar. Busca un sitio seguro en el habitáculo para que tu pequeña amiga llegue al destino en un excelente estado.
Aunque sean bastantes horas de viaje, no es necesario que tenga que ir introducida en agua. Así que no te preocupes: está comprobado que una tortuga aguanta hasta varios días seca sin padecer ninguna secuela grave.
Si tu mascota es un pez...
Si eres propietario de un acuario, evidentemente, no podrás llevártelo de vacaciones. Aún así, no te preocupes pues una pecera en buenas condiciones no tiene por qué padecer durante tu marcha.
Habitualmente las tareas se realizan cada varias semanas, por lo que Facilisimo.com te recomienda que antes de partir cambies el agua, relices los test estipulados para comprobar que todos los parámetros están perfectos, e instales un temporizador para que la luz se encienda y se apague en el horario establecido.
La alimentación de tus acuáticos amigos la puedes realizar utilizando preparados especiales para vacaciones o, a través de dispensadores automáticos que, también a través de un temporizador, arrojan la cantidad marcada de alimento una o dos veces al día. De todas las maneras es aconsejable que alguien vaya a comprobar si todo está correcto.
Como ves, existen multitud de soluciones para saber qué hacer con tu mascota durante el periodo vacacional. Si te la llevas contigo, lo pasaréis fenomenal y si la dejas, no te sientas culpable por ello. Lo que no debes hacer nunca por no encontrar una solución es abandonar a tu mascota; recuerda que él nunca lo haría.