Mi perro se come el empapador: ¿qué hago para impedirlo?

  Si eres de los que observas que mi perro se come el empapador, ese manto que ponemos para que pueda hacer sus necesidades en momentos de convalecencia, debes poner remedio y hacer que cambie la actitud del animal.

En este post, analizamos este fenómeno, sus causas y la forma de evitar que se obsesionen con este comportamiento.

 

Por qué el perro puede comerse el empapador

  Pese a que puede parecernos algo extraño, los perros pueden encontrar apetecible el comer papel, como el que conforma los empapadores para perros. Esta conducta tan inusual puede venir acompañada de la ingesta de otros objetos inadecuados y suele ser motivo de preocupación para los propietarios, puesto que puede suponer un problema de salud para nuestro can.

La ingesta del empapador es una conducta inapropiada que se enmarca dentro del conocido como trastorno de pica, entendiendo que el pica se caracteriza por impulsos del animal de consumir elementos fuera de su alimentación normal, por lo que podrían perjudicar seriamente su salud. La coprofagia (la ingesta de heces propias o ajenas) o el consumo de tierra o ropa son otros ejemplos de este problema.

Entre los orígenes de este trastorno, destacamos los siguientes.

 

Aburrimiento

  Muchas veces, esta problemática está asociada a que el perro se encuentra aburrido en el hogar y por este motivo necesita buscar alternativas para mantenerse entretenido. Estos casos se dan sobre todo en perros que pasan muchas horas solos o a los cuales no se les presta demasiada atención y/o necesiten más actividad, como no jugar lo suficiente con ellos o no sacarlos a pasear tanto como convendría. Esta falta de actividad puede, a su vez, generar frustración y ansiedad en tu perro, lo que dará como consecuencia otras conductas inadecuadas y un estado de ánimo nervioso.

 

Ansiedad por separación

  Las conductas destructivas, entre las cuales se encuentra el destrozar periódicos, papel de baño, etc., pueden asociarse, también, a un problema de ansiedad por separación. De forma similar al caso anterior, este comportamiento se da en perros que pasan horas solos, pero que, además, son muy dependientes emocionalmente de sus compañeros humanos, de manera que si no se encuentran con estos se genera un alto nivel de ansiedad y estrés, los cuales se manifiestan en conductas como destrozar distintos objetos del hogar (no solo papel), ladridos excesivos cuando el propietario abandona el hogar

 

Falta de nutrientes

  Una carencia nutritiva puede ocasionar conductas de ingestión adecuadas, tales como tratar de comer papel o derivados como cartón. Incluso, puede intentar comer otras cosas, como tierra o heces. Así pues, si notas que tu perro come papel higiénico, periódico, cartón y otros materiales, no dudes en revisar su alimentación para comprobar si es esta la causa.

 

Encuentra el papel apetecible

  En caso de que el papel que ingiere tu perro sean servilletas usadas o estén manchadas con algún tipo de sustancia, podría ser que el olor que desprenden resulte apetecible para tu perro y por este motivo lo ingiera. Sería común, por ejemplo, si proviniera de la cocina o del cubo de la basura.

 

Patología clínica

  Es posible que tu perro haya empezado a comer papel debido a alguna enfermedad, como por ejemplo dolor estomacal, una afección de tiroides, diabetes

Estos casos se dan sobre todo en perros adultos o ancianos, aunque no descartamos que pueda darse también en cachorros, de forma repentina. Si sospechas que pueda darse por este motivo, consulta con tu veterinario lo antes posible para que pueda descartarlo.

 

¿Qué pasa si mi perro come papel?

  Esta conducta puede suponer un gran riesgo para la salud de tu perro, puesto que el comer papel higiénico, periódico, cartón, etc., podría obstruir las vías respiratorias y, por lo tanto, ahogarle e incluso causarle daño interno en el estómago o el intestino.

Por esta razón, no dudes en llevarlo al veterinario si observas que tu peludo trata de vomitar, tose, parece que tiene algo atorado en la garganta o tiene dificultades para respirar, hace diarrea o, contrariamente, no consigue defecar.

 

¿Qué hacer si mi perro come papel?

  Que tu perro coma papel puede ser un inconveniente para poder lograr una convivencia armoniosa con él. Pero además, como hemos comentado, es también un riesgo para su salud física y un indicativo de malestar psicológico. Por lo tanto, no debe ser ignorado. En estos casos, deberemos llevar a nuestra mascota al veterinario para que te ayude a determinar la causa de esta conducta, descartando que no tena un origen orgánico. En caso de que sea un trastorno puramente conductual, el procedimiento que te aconsejamos seguir para evitar que tu perro coma papel será el siguiente:

 

Evita que tu perro tenga a su alcance papel

  Mantén fuera del alcance de tu perro toda clase de papel, como cartón, papel higiénico, servilletas, papel de periódico Por esta razón, es recomendable vigilar a qué lugares tiene acceso tu perro, bloqueando la puerta del baño o de la cocina y cerrando el cubo de la basura, por ejemplo.

Si es cachorro y todavía no puede salir a la calle, puedes optar por utilizar empapadores en lugar de papel de periódico. Si igualmente los come, entonces deberás pautar tú el horario para estar presente cuando haga sus necesidades y asegurarte de que no come nada indebido.

 

Mejora el bienestar físico de tu perro

  Una vez que tengas la situación controlada, deberás tratar de averiguar en qué aspecto cojea el bienestar de tu perro. Puede que no le estés proporcionando una dieta adecuada y, por este motivo, tendrás que buscar la alimentación más conveniente para tu perro en función de su raza, tamaño y ejercicio físico realizado. En este aspecto, lo mejor que puedes hacer es consultar al veterinario.

Por otro lado, puede que tu perro necesite realizar más ejercicio. Si es así, recomendamos que como mínimo pasees a tu peludo tres veces al día o que realices un paseo muy largo (como mínimo de hora y media) y otro más corto. Ten en cuenta que hay perros que necesitan más ejercicio que otros y, por lo tanto, las razas más activas puede que con dos horas al día de paseo no tengan suficiente.

 

Ten a tu perro entretenido

  Es aconsejable también mantener a tu perro cansado mediante ejercicios cognitivos. Es decir, deberás proporcionarle actividades que le estimulen mentalmente mediante juegos y enriquecimiento ambiental. Puedes, por ejemplo, dividir las porciones de comida que le damos al día y procurar dárselas de forma que supongan un reto: mediante juegos de olfato, juegos de inteligencia o como premio para el aprendizaje de conductas. Trata también de prestarle más atención a tu peludo y darle más tiempo de juego, siempre sin papel de por medio para conseguir que pierda el interés en él.

El enriquecimiento ambiental también es de vital importancia si tu perro pasa muchas horas solo en casa aburrido, por este motivo deberás darle juguetes atractivos que le proporcionen premios, de forma que lo disuadirás de jugar con otros elementos del hogar, como el papel de baño.

Si tu perro presenta este hábito de forma constante o como consecuencia de un trastorno más complejo, como la ansiedad, es recomendable consultar con un etólogo que pueda ayudarte a solventar el problema desde el foco de origen.