Hemos encontrado en el blog Archivos veterinarios un caso muy impactante. Es la historia de una perrita Bull Terrier que tuvo que ser atendida por la ingesta de un objeto muy peculiar. Con tan sólo tres años, el cachorro llegó a la clínica para ser atendido por profesionales.
En un principio, se intentó una técnica llamada "emético", que consiste en provocar el vómito al paciente canino. Este método era factible ya que se había comido el cuerpo extraño hacía tan solo 15 minutos y los veterinarios se habían cerciorado de que estaba ahí por medio de pruebas de imagen (Radiografía o ecografía abdominal).
De haber pasado más tiempo, esta práctica del vómito no habría tenido sentido, ya que el objeto ya se habría desplazado al intestino delgado. Recordamos que este método emético debe ser llevado a cabo por un profesional ya que tiene ciertos riesgos que pueden costarle la vida al animal. Esta es la historia de una perrita que se salvó gracia a los médicos.
Al no vomitar, pasada una hora, sometieron al perro a una operación. De las dos modalidades quirúrgicas existentes decidieron extraer el cuerpo extraño del estómago con una gastrotomía, que consiste en hacer una incisión en el abdomen para finalmente sacar ese objeto... ¡Que resultó ser un patito de goma! Increíble.
Nuestra amiga se recupera ahora estupendamente con una dieta cuidada y dentro de poco volverá a la normalidad.
¿Alguna vez tu mascota se ha comido algo raro?
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Imágenes: Archivosveterinarios.blogspot.com y Rocksss/Flickr.
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