Si estás pensando en tomar la generosa decisión de adoptar mascotas que proviene de un refugio de animales, en este reportaje intentaremos ofrecerte alguna orientación. Existen perros o gatos de todo tipo, desde cachorros o jóvenes hasta ancianos, e incluso animales enfermos. Las razones que motivaron su abandono pueden ser muy numerosas, y no siempre se deben a problemas de comportamiento del animal: un divorcio, una mudanza, una enfermedad o la conclusión en determinado momento de que no se tiene el tiempo suficiente para dedicarle.
Los perros que más abundan en las protectoras son los adolescentes y los ancianos. Muchos dueños tomaron de forma precipitada la decisión de adoptar mascotas y no pensaron cuál se adaptaba mejor a su estilo de vida, o no le dedicaron el suficiente tiempo a su educación y socialización. En muchos casos, se trata de dueños que tienen la sensación de no ser capaces de controlarlos.
La apariencia no es lo único que cuenta
Cuando nos acercamos a un refugio para adoptar a un perro, tenemos que tener muy claro qué es lo que queremos: un cachorro o un adulto, de pelo largo o corto, tamaño según el espacio con el que contamos en casa, si disponemos de tiempo para largos paseos en caso de querer un perro activo. Si tenemos niños, es importante comprobar que no les tenga miedo, que esté acostumbrado a ellos, y que reaccione con tranquilidad ante su presencia.Es mejor visitarlo varias veces antes de tomar la decisión de adoptarlo, de esta forma estaremos más seguros de que nos acostumbraremos mutuamente el uno al otro, de que sintonizamos. Llévalo a dar paseos para saber cómo se comporta. No es bueno elegirlo exclusivamente por su aspecto. Lo ideal es averiguar todo lo que se pueda de su vida anterior antes de traerlo a casa, lo comprenderemos mucho mejor.
Hay que pensar en la posibilidad de que presente algún problema de conducta, son animales que han vivido una situación traumática, pero cuanto mejor conozcamos los peligros y los riesgos, tendremos más herramientas para afrontarlos. En ocasiones, se trata de perros que han cambiado varias veces de hogar y éstos pueden ser más difíciles y conflictivos. En cualquier caso, la mayoría pueden ser reeducados con éxito, sobre todo en el caso de propietarios con cierta experiencia y si existe el consenso y la dedicación de toda la familia en cuanto a su involucramiento en el proceso de adaptación y corrección de posibles trastornos de conducta.
Visita obligada al veterinario
No olvides la visita al veterinario, tendrá que realizarle un chequeo general, y asesorarte con los calendarios de vacunación y desparasitación, como medidas preventivas ante posibles enfermedades. La identificación con microchip y el control de su natalidad son otros aspectos fundamentales que tendría que tomar en cuenta un dueño responsable.Si todo el proceso de adopción se hace a conciencia y somos capaces de dedicarle tiempo, espacio y comprensión, sobre todo en el periodo de readaptación, lo más probable es que podamos convivir en armonía y disfrutar al máximo de nuestro nuevo animal de compañía. La satisfacción alcanzada en estos casos y el cariño de nuestra mascota darán por buenos todos los esfuerzos.
Imágenes: Facilisimo.com, José Ramón Hoz