Las alergias se deben a que al limpiarnos, creamos una proteína que se traspasa a nuestro pelo, y de ahí se aloja en la ropa, las paredes y el ambiente. Las células dendítricas de los humanos identifican esta proteína como una amenaza, y por eso reaccionan con estornudos, o incluso con ataques de asma.
Para que la alergia a los gatos desapareciera sólo tendrían que conseguir controlar la proteína. Este descubrimiento, además, también contribuye a identificar el problema de las alergias a los perros o al polvo.
¿Qué te parece que se busque una cura para la alergia a los gatos?