Fue a mirar el correo y lo que se encontró no fueron cartas, sino... ¡una cobaya!

Un día cualquiera, sales por la puerta de tu casa, te acercas al buzón y, seguramente, ni mirarás si hay correo, meterás la mano y si lo hay lo sacas y sino, pues obviamente no sacas nada. Este no fue el caso de una mujer en Kansas, Estados Unidos, pues lo que se encontró fue sustancialmente distinto.

Al mirar en el buzón vio en la oscuridad de este unos ojos rojos que poco querían saber de ella o de nadie. Una cobaya estaba allí y no sabía cuanto tiempo podía haber pasado desde que la metieran en ese buzón y la privaran de toda libertad. Inmediatamente la estadounidense llamo a la oficina del sheriff y acudieron de inmediato.



Dada la seriedad del asunto, el sheriff no tardó en ponerse a investigar quien había sido el responsable y dejó al conejillo de indias en un albergue. En el albergue de Emporia la han acogido y puesto nombre, Rosita, por el color de sus ojos. Al llevarla al veterinario se llevaron la buena noticia de que era una cobaya perfectamente sana, a pesar de haber pasado horas en ese buzón sin alimentos ni agua.

El Sheriff descubrió investigando que se trataba de un abandono por parte de una mujer, ha decidido poner cargos contra ella por delito por maltrato animal. La persona que lo abandonó argumenta que ya no podía seguir cuidando de Rosita.



Poca razón para dejar de esa forma a una pequeña conejilla de indias, sin agua, sin comida y sin saber a ciencia cierta cuando se la descubriría, ¿no creéis?¿que habríais hecho en esta situación?

Fuentes: upsocl / kansas.com