El agua es vital para cualquier mascota, tal como sucede con los humanos, especialmente en los días de mucho calor. No olvides tenerla en un lugar de fácil acceso para ella, en un plato en su caja, jaula, cesta…
Casi todos los procesos y reacciones químicas que mantienen el cuerpo en funcionamiento, incluyendo la circulación y la digestión, dependen del agua. El agua ayuda al cuerpo a filtrar los desechos y regula la temperatura corporal mediante la evaporación. En consecuencia, la deshidratación puede causar serios problemas, incluyendo a los riñones y el corazón.
Para que nuestras mascotas no se deshidraten, hay que asegurarse que tengan siempre un recipiente limpio de agua dulce. Los animales pequeños como los conejos, hurones o roedores, tienen que tener siempre una botella de agua fresca en su jaula. Si la mascota pasa mucho tiempo al aire libre, no te olvides de sacar estos recipientes.
Imágenes/Flickr: Katri Niemi, bclinesmith.