Descuidos como tener un bote de detergente en el suelo, dejar el cubo de la fregona en la cocina con la puerta abierta o incluso no asesorarnos adecuadamente a la hora de comprar una planta de interior, son acciones muy comunes que pueden traer consecuencias graves para nuestras mascotas.
Dentro del hogar las mascotas se encuentran con numerosos peligros que con una vigilancia correcta y teniendo en cuenta ciertas precauciones como cerrar los armarios de la cocina o no dejarle paso a las habitaciones cuando estamos usando productos de limpieza se pueden solucionar. A continuación te mostramos los casos de intoxicaciones más comunes en mascotas dentro del hogar
Los productos de limpieza
Una de las situaciones más frecuentes es la ingesta de detergente. El mayor riesgo es que, aparte de irritar y producir vómitos, puede crear espuma y entrar en los pulmones provocando graves problemas respiratorios. Lo más importante, si sospechamos que nuestro animal ha podido ingerirlo, es no darle líquido, para evitar la espuma y acudir rápidamente al veterinario.
Más cuidado hay que tener con otros productos de limpieza, tales como la lejía, los desincrustantes o los desatascadores. Los síntomas de intoxicación por cualquiera de ellos son vómitos, diarrea y salivación excesiva. Normalmente, el tratamiento se basa en protectores digestivos. Como medidas de urgencia podemos darle agua para disolver el producto tóxico en el estómago y jamás debemos introducir los dedos en su boca para forzar el vómito.
Otros tres tóxicos habituales
1. Pegamentos y material de despacho: la toxicidad de los pegamentos depende del porcentaje de disolvente que contengan. Por ejemplo, la cola de empapelar no es tóxica. Los pegamentos de escritorio y el tipex pueden originar cuadros nerviosos, aunque sólo si son consumidos en grandes cantidades. Por último, los rotuladores, lápices de colores y resto de material de papelería que es utilizado por los niños, está sujeto a normas de seguridad muy estrictas y su toxicidad es prácticamente nula.
2. Desodorizantes: lo más frecuente es que contengan perfumes para evitar o camuflar los malos olores. Estos productos no presentan peligro, salvo los que están compuestos de esencias naturales o vegetales. Se ha descrito un caso de intoxicación mortal en un gato que fue frotado con esencia de lavanda.
3. Los insecticidas: su grado de toxicidad es bajo, por lo que estos productos no representan casi ningún riesgo para nuestros animales de compañía. En caso de usarlos en exceso en una habitación sin ventilación pueden provocar vómitos que remiten a las pocas horas, sin ser necesario un tratamiento veterinario específico.
Las plantas y los animales
A la hora de decorar nuestra vivienda con plantas tenemos que ser conscientes de que algunas pueden ocasionar complicaciones a nuestras mascotas. Los síntomas más comunes son alergias, problemas digestivos y reacciones nerviosas. El único remedio es sacar la planta de la vivienda y acudir al veterinario si los síntomas se prolongan en el tiempo.
Algunas de las plantas más tóxicas son la adelfa, el crisantemo, la hiedra, el jacinto, el narciso y el poto, entre otras. Para evitar cualquier accidente lo mejor es consultar con nuestro veterinario las plantas más adecuadas, tanto para interior como para el jardín. Asimismo, para evitar cualquier susto dentro de casa con nuestro animal de compañía, la precaución es nuestra mejor herramienta.
Imágenes/Flickr: Nan palmero, Mararie, DDFic, JupiterSSJ4, Shannonkringen y Tavallai.