La Psicología estudia el maltrato animal
Seamos amantes de los animales o no, es inevitable no estremecerse al ver las miles de historias, fotos o vídeos de animales maltratados que circulan por Internet. Este tipo de situaciones nos generan muchas dudas ¿Qué es lo que lleva a una persona a dañar un animal indefenso? ¿Son personas desequilibradas?
Estudios previos
La psicología lleva más de 50 años intentando dar una respuesta a por qué ciertas personas ejercen violencia contra los animales ¿Es un problema mental? ¿Está determinado por la situación? ¿Depende de la educación que recibimos?
A principios de los años 70 comenzaron a desarrollarse los primeros perfiles psicológicos. Con ellos se intentaba clasificar a las personas según su personalidad basándose en sus comportamientos comunes. Gracias a esos estudios se determinó que era extremadamente común que en su juventud los asesinos seriales y los violadores cometieran actos intencionados de tortura y crueldad hacia los animales.
En esa época este tipo de violencia, conocida por sus siglas en inglés IATC (Intencional Acts of Torture and Cruelty), formaba parte de la “Tríada Homicida” junto con mojar la cama y la piromanía. Los criminólogos creían que la combinación de uno o más de estos comportamientos durante la infancia incrementaba el riesgo de desarrollar una conducta homicida en la edad adulta.
Sin embargo, se trataba de estudios preliminares. Una serie de nuevas investigaciones nos permiten matizar estas afirmaciones mientras nos muestran una realidad mucho más compleja.
Estudios recientes
Lo primero que necesitamos entender es sí existe una relación real entre el maltrato animal y los actos de violencia humanos. Se han realizado numerosas investigaciones en las que se compara el porcentaje de maltrato animal existente entre la población criminal y la población sin historial de violencia.
A través de un meta análisis la psicóloga Emily Patterson-Kane, especialista en bienestar animal y relaciones entre animales y humanos, combinó los resultados de más de 15 de estos estudios.
Como era de esperar los resultados indicaron que un 34% de los delincuentes violentos tenía una historia de maltrato animal. Sin embargo, lo realmente sorprendente es que el 21% de las personas sin historial de violencia también tenían una historia de maltrato animal.
Lamentablemente el maltrato animal es más común de lo que pensamos. Hay estudios en los que cerca del 30% de los estudiantes universitarios afirma haber cometido algún acto de violencia contra un animal. De hecho, en una investigación publicada recientemente, los psicólogos Bill Henry y Cheryl Sanders de la Universidad de Denver, concluyen que
“Cierta participación en el abuso de un animal es considerado como algo normal entre los varones estadounidenses”.
El maltrato animal es una señal de que algo va mal
El maltrato animal es un problema serio y muy extendido. Se encuentra en diferentes culturas, edades y sexos. Las recientes investigaciones desacreditan la idea de que el maltrato animal sea el primer paso de un adulto homicida, sin embargo, es una señal de que algo va mal, de que existe una carencia (de educación, afectiva, de empatía) en esa persona. Si sabes de alguien que está involucrado en el maltrato grave e intencional de un animal, lo más probable es que necesite ayuda psicológica.
Fuentes:
Griffiths, M. The Psychology of Animal Torture. Psychology Today .https://www.psychologytoday.com/us/blog/in-excess/201611/the-psychology-animal-torture
Herzog, H Animal Cruelty and the Sadism of Everyday Life. Psychology Today. https://www.psychologytoday.com/us/blog/animals-and-us/201309/animal-cruelty-and-the-sadism-everyday-life
Herzog, H. Animal Cruelty Does Not Predict Who Will Be A School Shooter. Psychology Today. https://www.psychologytoday.com/us/blog/animals-and-us/201802/animal-cruelty-does-not-predict-who-will-be-school-shooter