Hago deporte corriendo de un lado para otro y persiguiendo a otros perros en el parque, pero con eso no basta. Para tener un cuerpo sano, la alimentación es esencial. Una alimentación libre de aditivos y sustancias químicas perniciosas era lo único que me faltaba para tener una vida completamente saludable. Los ecopiensos cuestan entre un 10 y un 20 % más, es cierto, pero a la larga compensan.
Algunos veterinarios recomiendan hacer una transición entre la comida normal y la ecológica, mezclando ambos tipos de alimentos durante un par de semanas. Por lo visto algunos perros tienen diarrea los primeros días de comer alimentos ecológicos porque su cuerpo está haciendo una purga de toxinas, y se nota al evacuar. Que le ocurra eso es la mejor noticia para su salud, pues se está limpiando por dentro.
¿Y tú, te animas a comer más sano?
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Modificado: