Para mantener una mascota como ésta en casa, es necesaria mucha información acerca de sus costumbres, alimentación, temperatura y hábitat ideal. Por otra parte, no todas las serpientes son adecuadas para criar en cautiverio, por lo que se debe tener en cuenta cuáles son las más aptas para ello.
Al igual que los anfibios, las serpientes se diferencian de los mamíferos en que no controlan su temperatura corporal por sí mismos, sino que ésta se regula por el medio ambiente. La temperatura ideal de los reptiles está entre 20 ºC y 40 ºC. La piel de estos animales es seca, no tiene glándulas. Muchos de los reptiles son carnívoros en su etapa adulta, y se alimentan de presas como ratas y ratones, peces, aves, gusanos y grillos, además de flores y hojas.
Especies y clasificación
Boas y pitones (género 'Boidae'): son las serpientes más primitivas. No matan a su presa mediante veneno, sino que utilizan el método de la constricción. Los pitones, que provienen del viejo mundo, varían en cuanto a medidas: desde las especies más pequeñas hasta la Anaconda o la Pitón reticulada. Las pitones son ovíparas, mientras que las boas son ovovivíparas. Las más conocidas como mascotas son la Pitón bola, la Pitón reticulada y la Pitón burmés.Género 'Boa': para este tipo de serpientes, lo más importante es la temperatura. La recomendada oscila entre 25 ºC y 35 ºC. Por debajo de los 22 ºC se vuelven inactivas. Los focos incandescentes no son adecuados: la iluminación ha de ser con focos UV.
El hábitat debe estar compuesto por sustrato de musgo u hojarasca, que debe mantenerse seco para evitar microorganismos, y hay que colocar un tazón de agua lo suficientemente grande para que quepa enrollada la serpiente y que no derrame agua al suelo. El terrario se debe desinfectar una vez al mes. También debes proporcionarle vasijas o escondites.
Colubridae (género 'Elaphe'): son las serpientes más populares y variadas.
La temperatura ha de oscilar entre 18 ºC y 28 ºC y la humedad ha de ser media-alta. Su longitud va de 0,8 a 1,2 m. y su belleza, colorido y docilidad hacen de este género una buena mascota. La mayoría son originarias de Norteamérica y son criadas en cautiverio.
Cuidar de tu serpiente
El mantenimiento de estas serpientes se puede llevar a cabo en peceras horizontales de vidrio o cajas de madera, con un sustrato de hojarasca o gravilla fina. En el terrario deben existir diferentes zonas, de calor y templadas, iluminadas y oscuras, con escondites y una cubierta de rejilla para una adecuada ventilación. Habrán de tener a su alcance un bebedero y un comedero. Se alimentan de gusanos (tenebrios y zofobas), peces y ratones.Es necesario tener cuidado con dejar huecos en el terrario o puertas y tapas fáciles de levantar o abrir. También es indispensable un termómetro dentro del terrario. Es posible que una serpiente recién adquirida o enferma no acepte comer fácilmente. Lo adecuado en estos casos es forzar la alimentación mediante corazones de pollo humedecidos con huevo crudo, guppies o culebrillas.