Día 1
MI PRIMERA ACOGIDA:
Por primera vez en la vida, ¡ soy casa de acogida! Me dió muchisima lástima Nando antes de ayer, pues estaba muy asustadito en el albergue, no quería jugar con otros perros, se escondía en cualquier hueco, sólo quería estar en su camita durmiendo. Asi que convencido mi novio, ayer me traje a Nando.
A ver si poquito a poco, lo va aceptando mi perro (es muy dominante, desconfiado e intolerante con otros perros). Ayer sólo le gruñó una vez, pero estuvo tenso todo el día, con miradas fijas, el lomo erizado...
Isabel
MI PRIMER OCUPA
Mi mamá se ha ido al sitio ese donde hay perros. Lo sé porque se ha llevado el mono de trabajo y las botas. Yo he salido al balcón a despedirla, como de costumbre. Pero si llego a saber que me iba a traer un regalito asi, ¡ ni me molesto!
Mira que le tengo dicho que no me gustan los perros. Tan marranos que se hacen pis por las paredes, y ladran a las palomas, a los petardos, a todo... ¡Qué coñazo!
Pues va la tía y me trae a casa un cachorrito. Ella dice que es solo un inocente galguito de 2-3 mesecitos. ¡ Eso habrá que verlo! Seguro que ya afloraron sus instintos jerárquicos, y está pensando en ser el lider de la mandada. Pues pienso dejarle bien claro quién manda aqui desde hace 10 años. Además, ya tengo calada su estrategia, me provoca para jugar, para que me piense que es mi amigo, y luego me clavará un puñal por la espalda!
Bully
MI PRIMER HOGAR
Se me han llevado de mi jaulita. Yo estaba asustado, nadie me explicó a donde me llevaban.
Me han dado un paseo por la playa. Es un sitio con arena por tooodo, es muy divertido porque te puedes pegar rato y rato escarbando, que sigue habiendo arena debajo.
Después me ha llevado a un sitio calentito, que los humanos llaman casa. No se está mal, me han puesto un transportin grande, donde yo puedo resguardarme y dormir a gusto. Tanto me ha gustado, que para mostrar me agradecimiento, he hecho pis y cacas en la casa, para que vean que estoy muy a gusto.
Me bañó en una palangana, no me gustó mucho, pero me estuve quieto. Lo que me horrorizó fue esa máquina que expulsa aire caliente. Semejante obra diabólica, no podía ser fruto, más que del Hombre.
En la casa hay un perrito. ¡Qué bien! Pensé cuando lo ví, pues así no tendría que estar siempre con los humanos, quienes me dan miedo. Pero algo me dice que éste perro es menos amable que la chica. De todas maneras, yo correteo a su alrededor, moviendo mi delgadito rabo, para que vea que solo soy un bebé. Me senté en su manta, y no veas que mirada me echó el tio. Chico, si cabemos los dos, pensé...
La noche la he pasado en el baño, lloré un poco pues estaba asustado y solito, yo hubiera preferido dormir con el perro. Pero bueno, nadie me ha quitado mis 8 horitas de sueño.
A ver que me depara el nuevo día... ¡Os contaré, amigos!
Nando
