Después de haberme titulado como experto en conducta animal y tras mi larga experiencia en trabajos de aprendizaje y corrección de comportamientos inadecuados de los animales de compañía, estructure buena parte de mis conocimientos teóricos y prácticos para desarrollar un sistema de adiestramiento encaminado a un doble objetivo: obtener el máximo provecho de las aptitudes de perro y afianzar la relación con el dueño.
El método de adiestramiento canino Hofer parte de las teorías conductistas de aprendizaje animal y de los ejercicios de la Escuela Alemana de Adiestramiento. Las primeras me han permitido perfeccionar los sistemas de asociación de estímulos y respuestas, que he integrado en un patrón de conducta unificado en el que todos los actos del perro quedan integrados y aseguran una convivencia rica y plenamente satisfactoria entre el perro y su amo.
En la actualidad, un número considerable de aficionados de toda España siguen el método, que, por otra parte, cuenta con la aprobación de veterinarios, adiestradores, criadores y otros profesionales del mundo canino.
?Por qué a domicilio?
El adiestramiento a domicilio permite una mayor comprensión del animal y ayuda al dueño a relacionarse mejor con él. De esta manera ambos obtienen la máxima satisfacción posible y pueden convertirse en buenos amigos. El objetivo principal del método es lograr que el perro obedezca a su dueño, que en definitiva es quien va a convivir con él.
El adiestramiento a domicilio es la única forma que permite la participación activa del amo durante todo el proceso de aprendizaje, a lo que debemos añadir la ventaja que supone lograr el desarrollo del animal en su propio hábitat. El territorio es un elemento que lo ayuda a sentirse más seguro. El perro debe identificar su hogar como su territorio, con unos límites, unas normas y un funcionamiento definidos.
Esto es importante, porque de los contrario, el perro (aunque haya aprendido a responder a determinados condicionamientos) no necesariamente obedece a su amo, sino que puede obedecer (y de hecho, sucede así) sólo al monitor, con el agravante de que pierde la asociación de espacio con el proceso educativo, lo cual dificulta aún más la adaptación.
?A qué edad se puede adiestrar a un perro?
Un postulado básico del Método Hofer es el refuerzo. Por ello recomendamos iniciar la educación desde muy temprana edad. Eso no significa que los perros adultos no sean igualmente aptos, porque a pesar de que a partir de los seis meses tienen ya muy acentuadas determinadas costumbres, los perros siempre están capacitados para aprender.
?Es posible solucionar cualquier problema?
Por supuesto. Muchos de los problemas que parecen de difícil solución para el amo (orines en casa, ladridos, agresividad con extraños, hacia otros perros o con los propios amos, destrozos en casa, miedo, etc) pueden ser corregidos. Simplemente se trata de aplicar la terapia de comportamiento idónea, en la cual el amo desempeña un papel fundamental.
Tratamiento personalizado
El método Hofer es flexible y se adapta a cada caso específico. Por esta razón, antes de iniciar la educación o el adiestramiento concertamos una entrevista personal para conocer al animal y su hábitat. En esta visita asesoramos sin compromiso alguno al dueño sobre el tipo de adiestramiento más conveniente y le proporcionamos una completa información sobre la viabiliadad del tratamiento que le recomendamos. El amo participa siempre activamente en la educación de su perro, que no concluye hasta que se obtienen los resultados convenidos.
El seguimiento
Después de impartir el adiestramiento se realiza un seguimiento periódico para corregir eventuales desviaciones. Una vez concluido el curso, hay que continuar practicando los ejercicios con el perro. Esto tiene una doble utilidad: reforzar las normas básicas de conducta del animal de compañía y trabajar para el cumplimiento de nuevos objetivos, lo cual refuerza el vínculo entre el perro y su amo.