Echar un vistazo a un Komondor,
y que pueden ser más propensos a pensar que no es nada más que un montón de cuerda sentado en el suelo. Estos perros de pelo gruesos parecen estar caminando rastas, pero detrás de una mata de pelo pueden estar seguros de que van a hacer su deber cada vez que sus propietarios o familias están en peligro.
Su extraña apariencia oculta una naturaleza muy protector, que a menudo entra en acción cuando se siente en peligro. A pesar de su tamaño, que es respetable en aproximadamente 54 a 68 kilos, estos perros tienen una sorprendente rapidez y agilidad, en comparación con los perros grandes como mastines que no se pueden mover lo suficientemente rápido para sorprender a un ladrón a los posibles intrusos.
Han sido criados para la velocidad y la potencia, capaz de saltar en un lobo o un cazador furtivo con el fin de mantenerlos alejados del ganado o la granja. Con patas delanteras largas y relativamente poco la de atrás, son capaces de saltar a la acción rápida con el fin de atacar una amenaza o asustar a un posible intruso. A pesar de una naturaleza muy protectora, estos perros son bastante plácidos cuando el mar está en calma, rara vez ladran y disfrutan de la compañía de los seres humanos y otros perros de confíanza.
Prefieren tener la libertad para vagar. A diferencia de una raza como el Doberman, estos perros son apreciados por su capacidad de pensar y actuar por sí mismos, y actuarán por instinto para proteger a la familia, incluso cuando se les da un comando de otro modo. Mientras que pueden ser muy eficaces como perros de guardia, necesitan una gran cantidad de aseo y cuidado para mantener su piel limpia, por lo que es un perro que requiere un poco más de mantenimiento que otros en esta lista.
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