En los últimos años, los camaleones se han convertido en una de las mascotas más solicitadas. Son animales muy tranquilos, silenciosos y sociables. El mayor inconveniente es que son muy delicados y necesitan cuidados muy específicos.
Según Antonio Rodríguez, veterinario y especialista en animales exóticos, "la mayoría de los casos de anorexia en España se dan en ejemplares comprados en Marruecos, donde se venden en mercadillos. Esta situación es preocupante y el 95% de los ejemplares acaba muriendo en condiciones pésimas, incluso asfixiados en las maletas, por lo que hay que condenar la tenencia ilícita de estos animales".
Las causas de la anorexia
Según Antonio, "el 90% de las patologías clínicas que padecen los camaleones se derivan del mal manejo de los mismos". La anorexia suele derivarse del síndrome de maladaptación que se produce cuando el reptil no se acostumbra a su nuevo hábitat y deja de comer.
Lo más normal es que la anorexia esté acompañada por deshidratación. Por ello, debemos de observar atentamente si nuestro camaleón bebe y come correctamente, puesto que la enfermedad podría degenerar en caquexia y conducir a la muerte.
Estas patologías son muy comunes en los animales capturados, que suelen estar deshidratados, parasitados, estresados y debilitados. La anorexia también puede asociarse a múltiples enfermedades, según el especialista.
Los primeros síntomas y cómo detectar la enfermedad
Los ejemplares más jóvenes tienen más riesgo de padecerla, porque son más débiles y no cuentan con reservas para afrontar el periodo de ayuno. El primer punto que debemos tener cuenta, es saber de dónde procede el camaleón que estamos adquiriendo. Para nuestro profesional "es lógico, que la anorexia aparezca en las crías por dos razones: en primer lugar, porque desde que se cría en cautividad o captura hasta el punto de venta, los animales viven hacinados. Y en segundo lugar, porque muchas veces les damos presas demasiado grandes que no pueden digerir".
Los síntomas más característicos son: piel reseca, ojos hundidos, restos de heces en la cloaca y adelgazamiento progresivo. Debemos acudir al veterinario en cuanto notemos alguna anomalía en su comportamiento, puesto que los camaleones entran con mucha facilidad en un punto sin retorno, donde la recuperación es casi imposible.
Los tratamientos más frecuentes
Rodríguez responsable de la Clínica El Bosque, dice que "la primera medida cuando llega un camaleón con anorexia a la consulta es rehidratarlo. Lo primero es dejar caer unas gotas de agua en la comisura de la boca, si no responde se le dará suero para intentar recobrar el equilibrio electrolítico. Por último, se le puede rehidratar mediante un catéter intraóseo"
En cuanto a la comida, no se le debe forzar. Un consejo es acercarle la presa y, si la evita, podemos optar por sondarle para suministrar una dieta rica en grasas y proteínas. Si el animal aún no está muy débil, una buena idea es darle baños de agua templada (25 grados aproximadamente).
?Cómo prevenir su aparición?
El camaleón necesita vivir en un entorno con unas características muy específicas. En primer lugar, el terrario debe ser lo más grande posible, con una temperatura entre los 25ºC y 28ºC grados y una humedad cercana al 85%.
Para nuestro experto es fundamental la iluminación, "que debe estimular los ciclos vitales del camaleón. Asimismo, la luz UVB es necesaria para la activación de la vitamina D3". Otro aspecto clave es asegurarnos de darle una dieta equilibrada cuya base deben ser los grillos y las langostas. Como complemento podemos darle gusanos (ricos en grasa), fruta y ratones pequeños. Según el especialista debemos proporcionarle calcio tres veces a la semana y vitaminas cada 15 días. El agua se la daremos mediante un sistema de goteo.
Los primeros días estaremos atentos a su adaptación al entorno. En caso de tener más camaleones esperaremos 60 días para juntarlos. Para este especialista, lo único que hay que hacer es proporcionarles alimento, agua abundante y tranquilidad.
En definitiva, la anorexia no tiene una causa clara y puede tener consecuencias muy graves si no es detectada y tratada rápidamente. Ante la menor duda debemos acudir a un veterinario que nos ayude a solucionar el problema. Asimismo, proporcionaremos a nuestro camaleón un entorno lo más parecido posible a su hábitat y evitaremos comprar camaleones que hayan sido capturados de forma ilegal.