Anteriormente se tenía la duda de los huesos en perros si debíamos alimentar a nuestros perros con huesos.
Gracias a investigaciones de personas especializadas en el tema se pudo comprobar que los huesos en perros pueden llegar a resultar peligrosos, ya que, los pedazos de hueso y fragmentos se pueden romper mientras el perro los mastica, y por ende ser tragados.
Si logran pasar los huesos en perros al intestino, pueden causar una obstrucción o rasgar el revestimiento, lo que puede causar una hemorragia interna.
¿Por qué no dar ningún tipo de hueso a mi perro?
HUESOS CRUDOS: los huesos crudos tienen un mayor riesgo provocar la salmonela y siguen siendo igual de peligrosos para ingerir como los huesos cocidos.
HUESOS DE POLLO: Los huesos de pollo tienen una alta probabilidad de ser peligrosos para los perros debido a su tamaño pequeño y delicado, pero se ha demostrado que todos los demás huesos se descomponen en fragmentos peligrosos también.
¿Qué otros problemas puede acarrear darla huesos a mi perro?
Existen otros riesgos aparte de los mencionados anteriormente y estos son; dientes rotos, problemas en las encías, asfixia y que los huesos se queden pegada a lo largo del camino, desde el esófago hasta el estómago. Los huesos pueden romper cualquier porción del sistema digestivo, causando problemas de salud igualmente peligrosos para tu mascota, que requieren atención inmediata por parte de un veterinario.
¿Acostumbras darle huesos a tu mascota?