Además, después de detectar una sustancia estupefaciente que los policías humanos habían escondido, y de atrapar a un 'delincuente', disfrutaron de las caricias de unos 200 niños de preescolar y primaria.
Además, Topo y Rico también se lo pasaron muy bien cuando, después de haber trabajado un poquito, vieron cómo las crías de humano disfrutaban de la moto, los coches y la furgoneta de la Policía. Por lo que me cuentan, los niños se sintieron policías, ya que les hicieron un carnet con foto y huella digital. ¡Ni siquiera Topo y Rico tienen uno de esos!
¿Qué te parece que se enseñe en los colegios cómo trabajan los perros policías?
(Foto: www.hoy.es)