El perro de raza Vizsla es originalmente de la tierra de Hungría, con una utilización como rastreador y cobrador de presas. Entre sus antepasados encontramos perros como el Hound de Transilvania y el Turkish Yellow Dog, y algunos aseguran que tiene similitudes con el Braco de Weimar y el Pointer, también.
El vizsla es un perro muy cariñoso y efusivo. Es alegre y enérgico, muy juguetón y en extremo inteligente. Lo más importante de su carácter, más que todo lo anterior: es muy familiar. Le gusta estar rodeado de sus seres queridos, en manada; si está mucho tiempo solo puede llegar a caer en depresión y enfermar gravemente, así que tenemos que evitarle la soledad.
En casa tenemos un perro ideal. Como es muy familiar, le gusta estar dentro con sus dueños, de modo que no es bueno dejarlo en el jardín, a solas. Esta raza puede volverse muy dependientes de sus dueños, siempre estarán buscando su atención, cariño y cumplidos. Es muy bueno con los pequeños de la casa y no suele tener inconvenientes con otras mascotas, incluyendo gatos y otros perros. Como el vizsla es muy enérgico es conveniente que tenga patio para moverse a sus anchas, pero de vivir en un apartamento no pasa nada, basta con que pasee todos los días varias veces.
Su habilidad, resistencia y fortaleza convierten esta hermosa raza en un gran perro cazador. Tanto en tierra como en agua es útil y eficiente: rastrea con determinación una presa y la persigue hasta darle caza, y después la lleva hasta su dueño. Soporta el trabajo y las inclemencias del tiempo estoicamente sin dar muestras de cansancio.
El adiestramiento del vizsla es fácil de llevar a cabo. Gracias a su inteligencia podrá aprender y adiestrarse con facilidad, esta es una raza que siempre estará feliz por complacer a su dueño. Es recomendable cansarlo antes de las sesiones de entrenamiento, pero aparte de eso verás que se mostrará ansioso por saber más, sólo por poder complacerte.
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Saludos,
Marcos Mendoza