Tomado de Max El Perro
Todo comenzó con un accidente. Karma se cayó al río y Rick se tiró para rescatarla, una hazaña muy heroica. El dueño de la perrita, enfermó y tuvo una fuerte infección que hizo que tuvieran que hospitalizarle. Y es que este río de Luisiana no es nada saludable.
Tia Torres, la mujer que dirige un refugio de pit bulls que han sido abandonados o maltratados, acogió a Karma cuando se enteró de la noticia. Rick, a pesar de sus malas circunstancias, hasta que no supo que su perrita estaría en buenas manos no se subió a la ambulancia. Para él, Karma era muy importante y no la iba a dejar en cualquier sitio.
Mientras Rick estaba hospitalizado, Karma estuvo esperando a su dueño y nunca perdió la esperanza por volver a reencontrarse con él. Sin embargo, no había nada seguro. Tia Torres ni siquiera sabía el apellido de Rick ni tampoco durante cuánto tiempo estaría hospitalizado ni en qué hospital. Todo parecía apuntar a que el dueño no volvería a por Karma. Así que empezó a buscarle una nueva casa para ella, estaba preparada para dejarla en el refugio VRC.
Pero algo inesperado cambió su vida. Tras dos semanas después del ingreso en el hospital de Rick, éste volvió a por Karma. El reencuentro fue realmente conmovedor. Para ambos, esas dos semanas habían sido eternas y tenían muchas ganas de estar juntos.
Después de este magnífico desenlace, la pareja de Rick y Karma vivieron felices gracias a que Tia Torres les ofreciera una vivienda temporal y un trabajo para Rick en el mismo refugio a tiempo parcial.
Fuente: Max El Perro