Es complicado escribir unas palabras en un medio como este que no resulten vanas o manidas o hayan sido ya muchas veces utilizadas, pero lo que está claro es que la Navidad, nos guste o no, mueve muchas, muchas cosas...
Mueve trabajo, algo tan valorado hoy en día (y tan escaso...), mueve dinero, muchos gastos a veces innecesarios pero que nos reconfortan y nos ofrecen un pequeño desahogo frente a ciertas privaciones que tenemos en cuenta a lo largo del año y que en estas fechas se olvidan, mueven encuentros con personas poco vistas durante el resto de nuestro tiempo, provoca muchos desplazamientos para ver finalmente a tus seres queridos y sobre todo, mueve sentimientos, unas veces encontrados, otras veces provocados.
Pero el caso es que ahí están...
Nos gustaría de verdad, comenzar estas fiestas con una gran sensación de PAZ, de esa que te llena por completo, que desplaza todo lo desagradable que nos invade hacia un infinito del que nunca pueda volver, y que deje de molestar nuestras pobres y pequeñas mentes...
Y más que una sensación de AMOR, nos gustaría disfrutar de una gran sensación de EMPATÍA, de esa auténtica unión con los demás, en la que realmente compartes no solo una cena en Noche Buena, una comida en Navidad o unos pocos momentos con unas copas o un café, si no con la que te sientas en perfecta consonancia y armonía con el cosmos.
Bueno, lo mismo pedimos demasiado, pero como estamos en Navidades y deseamos olvidarnos de las imposiciones que cada vez nos resultan más cotidianas, nos queremos permitir esta licencia y este pequeño lujo. Por pedir, que no quede...
Así que desde este pequeño reducto que es nuestro blog, todos los componentes de
Soñando con Perros... os deseamos desde lo más profundo de nuestro corazón,
unas muy FELICES FIESTAS y sobre todo, que encontréis esa Paz y ese Amor que al fin y al cabo es lo que todos buscamos... :)
Fuente: este post proviene de Blog de COSAGUAPA, donde puedes consultar el contenido original.
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