Cuando crecen, conservan el hábito como forma de buscar placer y tranquilidad y, a los propietarios, nos suele gustar. También es común que los gatos adultos que fueron destetados precozmente, conserven este hábito como una forma de autocalmarse y sentirse mejor.
Desde un punto de vista fisiológico, durante este movimiento, el cerebro genera endorfinas, unos neurotransmisores relacionados con el placer. Entonces podemos decir que les gusta.
Sin embargo, cuando este comportamiento se realiza con demasiada frecuencia debemos considerar la probabilidad que exista algún problema. Puede que el gato use esta conducta aliviar algún problema físico subyacente o que no se sienta a gusto por alguna razón, sobre todo relacionada con su ambiente, e intente calmarse a si mismo utilizando este sistema. Si notamos que aumenta o se reduce en frecuencia deberíamos comentarlo al veterinario por si supone algún problema de salud.
Eme tiene ocho meses y es una preciosa carey, mimosa y juguetona que espera en su casa de acogida un hogar definitivo.
Toda su historia está aquí: http://www.esperanzafelina.com/archives/14032
Para adoptar: adopcionesesperanzafelina@gmail.com