En un primer momento la Guardia Civil de Cella recibió una denuncia por parte de la ganadería que tiene en la propia Laguna sus caballos pensando que los restos pertenecían a uno de sus caballos. Los componentes del Puesto de Cella iniciaron una investigación en ese momento a raíz de la inspección llevada a cabo en el lugar en el que aparecieron los restos del animal sacrificado, comprobando en la misma que los restos habían sido depositados en el lugar y que el sacrificio no se había producido in situ. Tras un recuento de la ganadería denunciante se observó que el animal muerto no les pertenecía.
La Guardia Civil, tras la labor de investigación pertinente, descubrió al auténtico propietario de la yegua, y detuvo el pasado día 19 de junio a J.G.B. de 22 años como autor de un delito contra la flora y la fauna por maltrato a animales domésticos, y a J.M.C.T. de 32 años y a A.H.N. de 31 años y propietario de la yegua, como cooperadores necesarios. Todos vecinos de la localidad de Cella.
El propietario de la yegua (A.H.N.), junto con el cuidador de la misma (J.M.C.T.), decidieron sacrificar al animal, para lo que se concertaron con una tercera persona (J.G.B.), el autor material del delito que dio muerte a la yegua. Posteriormente contactaron con otras personas para el despiece de la yegua. Éstas entregaron la carne del animal al cuidador, quien a su vez vendió la carne a otra persona ajena para su consumo, el cual, al enterarse por la prensa del origen de la carne, la tiró a un contenedor de restos animales.
Conforme al artículo 337 del Código Penal (el que por cualquier medio o procedimiento maltratare injustificadamente a un animal doméstico o amansado, causándole la muerte o lesiones que menoscaben gravemente su salud será castigado con la pena de tres meses a un año de prisión e inhabilitación especial de uno a tres años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales) se ha imputado el citado delito a los tres detenidos. Además se han cursado cinco sanciones administrativas por diferentes infracciones.
La Guardia Civil en su función de protección a la Naturaleza (SEPRONA), vela por la conservación del medio ambiente fomentando las conductas de respeto a la naturaleza. Vigila y previene las infracciones contra la Flora y la Fauna, realizando acciones tendentes a favorecer su normal desarrollo y contribuyendo al correcto aprovechamiento de los recursos naturales e impidiendo las prácticas ilegales y abusivas contra los animales y la flora.
Fuente: http://www.ecodeteruel.tv/?p=53450