Un perro que se rasca sin motivo aparente, en realidad nos está pidiendo "tiempo muerto" o mostrando cierta preocupación por una potencial situación de conflicto.
Se puede observar cuando estamos tratando de enseñar cierta habilidad nueva y no respetamos sus tiempos (se rasca para darse una pequeña pausa) o cuando se enfrenta por primera vez a un perro desconocido y del que no tiene claras las intenciones, como una forma de evitar la mirada y por tanto el enfrentamiento directo.
Imagen: http://goo.gl/7WdpAx