La respuesta de la mayoría de estos voluntarios es la misma: bueno, no lo hago.
Lo cierto es que estas personas conectan con un perro en la protectora o el refugio, se enamoran perdidamente de esos animales tristes, a menudo con problemas, y quieren darles confianza, amor y un lugar donde sentirse a salvo.
Así que este voluntario completa el papeleo, y se lleva al perro. Posiblemente es un perrito que no mira a los humanos, que permanece apartado, que no juega ni corre, que tiene miedo o no siente confianza.
Eso es lo que las casas de acogida les dan a estos animales: confianza. Con el paso de los días y con mucho, mucho amor, se aseguran de que los perros descubran el amor y el calor de un hogar. Estos perros aprenden aquí a ser perros: a jugar, a divertirse, a explorar el mundo, a confiar en los humanos que los quieren.
En los refugios, santuarios y protectoras hay muchas limitaciones: son muchos animales, tienen jaulas, escasez de material y comida… es muy difícil. En las casas de acogida, no obstante, hay espacio de sobras, y toda la familia se involucra en mimar y educar a estos perritos.
Y así, cuando el perro está sano, feliz y lleno de confianza y energía, es el momento de que encuentre a su verdadera familia, la definitiva, aquellos que lo van a querer hasta el final de sus días.
Dejar marchar a este perro es muy difícil para la familia de acogida. Estas personas han luchado por ayudarlo y curarlo, y deja un vacío atrás que parece imposible de llenar. Pero son familias con un destino: seguir ayudando a otros perros.
Así pues, hay una pérdida y el perro encuentra su verdadero hogar, y la familia llora su marcha… pero luego, más fuertes y con renovadas energías, buscan a otro perro que necesite su ayuda, y el ciclo vuelve a empezar.
No sé tú, pero a mí me parece que estas personas son verdaderamente heroicas.
Marcos Mendoza
PD: Si deseas conocer más sobre cómo ayudar a los perros en protectora, o a si quieres más historias conmovedoras como esta, visita mi página para obtener información, consejos y anécdotas