Es de vital importancia conocer a nuestro perro, saber cómo reacciona a nuestros movimientos corporales, a nuestro nivel de energía, a nuestra actitud. La mayoría de las veces todo esto trae consigo más significado que las palabras. Palabras y más palabras, nuestro intento de que nos entiendan… les inundamos a comandos que, en muchas ocasiones pierden su eficacia por:
No tener ningún significado para el(por suponer que de manera natural nos entienden, o, que no se ha cerrado bien el proceso cognitivo de la enseñanza). Pidiéndole encarecidamente que nos obedezca cuando el pobre no entiende lo que queremos de el. Perdiendo así interés en nosotros y consiguiendo únicamente que ese momento de comunicación solo haya servido para la no comunicación, para enturbiar la relación (mínimamente, pero constantes peticiones sin sentido para el perro a medio/largo plazo harán que este deje de prestar atención al dueño).
Si lo entienden, pero se acostumbran a oírlos 500 veces, repetición tras repetición, con su consiguiente pérdida de atención e interés. No debemos cansar al perro con tantas repeticiones o se hará vago y obedecerá, si así le hemos enseñado, a la quinceava petición.
El título de este artículo va relacionado con nuestra capacidad mental, somos el animal más inteligente de la tierra, tenemos un cerebro privilegiado para poder estudiar el comportamiento de nuestro perro mediante libros de conducta canina, artículos por internet, seminarios de profesionales, cursos …debemos ponernos en la piel del can y comportarnos de una manera que a el le sea fácil de comprender como perro, debemos ser más perros. Y no al revés! no intentar que nuestro perro sea humano, realice acciones de humanos ni confundirle con pensamientos o cualidades humanas. Estaremos confundiéndole de identidad, su DNI canino, sus costumbres y conductas, su forma de expresarse… un perro es un perro igual que a un caballo se le trata como caballo o a un camaleón como camaleón. Y el 90% de los problemas de conducta caninos se dan por esta razón.
Cuidemos las miradas, los movimientos corporales, los sonidos y démosles significado. Notaremos como cuando conectamos con el perro visualmente se nos queda atento, pues sabrá que a continuación vendrá una acción, estará conectado a nosotros de la manera más natural, sin palabra ninguna. Los comandos son necesarios, si, pero en la mayoría de las ocasiones que queremos algo del perro con un gesto o mirada debería bastar para entendernos.
¿Qué métodos de comunicación sin usar palabras tenéis con vuestros perros? Compartamos nuestras experiencias!!