La higiene de nuestra mascota es básica, y por eso te ofrecemos aquí los cinco cuidados esenciales que cualquier animal necesita.
La hora del baño
El baño es fundamental para eliminar los malos olores y la suciedad. Es cierto que, por ejemplo, los gatos se bañan ellos mismos y tienen fama de ser animales muy limpios. Asimismo, si queremos que nuestra mascota esté limpia debemos bañarla, sobre todo en el caso de los perros que salen a la calle. Lo más recomendable es hacerlo una vez al mes, desde que son pequeños, para que se acostumbren a esta rutina.
Ahora que se acerca el calor, es mejor bañarlos con agua tibia, utilizando siempre jabones y champús específicos para ellos y secándolos después con toallas y con el secador.
El cuidado del pelo
Junto con el baño, es uno de los cuidados más importantes y que más tiempo requiere, sobre todo en animales de pelo largo. Lo primero que debemos saber es que el manto tiene tres etapas: crecimiento, muerte y caída, además de contar con un pelaje principal y uno más corto, al que se conoce como submanto.
La clave está en habituarlos al cepillado desde pequeños, puesto que los beneficios son innumerables: permite vigilar la eventual aparición de parásitos externos, elimina el pelo muerto, etc. Otro factor importante es elegir el cepillo más adecuado, los expertos recomiendan los peines con púas separadas para pelaje largo y con dientes juntos para el manto corto. En ambos casos, siempre los peinaremos en contra del crecimiento del pelo.
Presta atención a las uñas
En el caso de los perros no hace falta cortárseles las uñas porque el roce de las mismas con el suelo las desgasta de forma natural. Pero si hablamos de otras mascotas como los gatos es recomendable adquirir un cortaúñas especial para ellos y tener mucho cuidado al realizar la operación.
También debemos acudir regularmente a la peluquería para que se les recorten los pelos de las patas y evitar el exceso de suciedad en la zona.
Una boca perfecta
El mal aliento suele ser bastante frecuente en nuestras mascotas, a la vez que es realmente molesto para nosotros. Algunas de las causas son las enfermedades dentales producidas por bacterias, la salivación excesiva, las alteraciones digestivas, renales o respiratorias. Por supuesto, ante estas afecciones debemos acudir al veterinario.
Normalmente el mal aliento se debe a una mala higiene bucal, que notaremos por el color amarillento de los dientes o por la acumulación de sarro. Hoy en día, en el mercado podemos encontrar pastas dentífricas especiales o productos como huesos que limpian sus dientes y encías. También los piensos de gama alta contribuyen a mantener la boca de nuestro animal más sana.
Su sitio en casa
Desafortunadamente, casi ninguno vivimos en grandes casas de campo donde nuestro animal goce de mucho sitio. La mayoría tenemos pisos pequeños, donde nuestra mascota necesita tener delimitado su espacio desde el primer momento. Lo básico, es proporcionarle un lugar bien ventilado y soleado. En él pondremos la cama, que debe estar siempre limpia y seca.
Es importante que limpiemos todos los días el comedero y el bebedero. Si por accidente el perro orina en la casa, lo mejor es fregar el suelo con agua y vinagre.
Si seguimos estas cinco pautas de higiene básica, no sólo conseguiremos que nuestras mascotas estén más guapas, sino que evitaremos la aparición de enfermedades. Estas recomendaciones siempre tienen que estar también acompañadas de un seguimiento por parte del veterinario.