Cómo educar a un perro asocial con otros perros

¿Cuántas veces nos encontramos con perros que van paseando tranquilamente pero que cuando se cruzan con otro perro se vuelven agresivos? Los propietarios de estos perros no tienen ni ganas de salir a pasear, porque realmente pasan un calvario, y cuanto más grande es el perro peor, porque a los ladridos y tirones se unen la fuerza de un perro de raza grande que difícilmente puede controlarse. Pero, ¿por qué el perro es así? ¿Por qué no puede pasear sin meterse con ningún perro? ¿Es este tu problema?



Los perros que son incapaces de pasear por la calle sin meterse con otros perros tienen un grave problema de socialización. Este problema se origina cuando el perro tiene entre 2 y 4 meses y no ha sido correctamente socializado, ¿por qué? Porque la gran mayoría de veterinarios exigen a sus clientes que no deben sacar al cachorro a la calle hasta que tenga todas las vacunas puestas, y casualmente, el periodo de vacunación coincide con el periodo de socialización del perro. El hecho de estar aislado del mundo en un periodo muy sensible, socialmente hablando, provoca que el perro desarrolle una personalidad antisocial, que puede traducirse en comportamientos de miedo o agresividad hacia otros perros o personas, en definitiva, a su entorno.

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 Si aún estás a tiempo y tienes un cachorro que aún está en este periodo de socialización, es decir, entre los 2 y los 4 meses, no dudes en relacionarlo con su entorno: con otros perros, personas, sonidos, etc. Es fundamental que lo hagas, siempre bajo tu supervisión para que tu cachorro no lama o coma cosas del suelo, no se relacione con perros vagabundos que pudieran tener enfermedades, etc. Si tú relacionas a tu cachorro con otros perros, diariamente, garantizarás que en un futuro no desarrolle estos problemas de perros que cuando ven a otro perro se les va la vida ladrando y queriendo lanzarse sobre ellos.

¿Tienes un perro que estuvo aislado durante ese periodo y estás sufriendo estos problemas? No te preocupes. Se puede reeducar aunque te lleve más tiempo y te consuma mucha paciencia. Tienes que entender que tu perro sufre mucha ansiedad cuando se encuentra en este estado: tu responsabilidad es conseguir que ese perro ansioso, se vuelva equilibrado. ¿Cómo? Dándole un chute de socialización.

Para empezar, tu perro debe ir siempre con correa, y si es de los que ataca, siempre con bozal. Cuando salgas a pasear y te encuentres en esta situación, no tires fuertemente de la correa porque, contrariamente a lo que se piensa, cuanto más tires de él, más fuerza y más control va a ejercer sobre ti. Si tu perro siente que tú estás detrás, va a asumir más valentía, por tanto, prueba de soltar la correa (recuerda hacerlo cuando lleve bozal y ante un perro que veas que no es dominante) y deja que haga. También hazlo en una zona donde el perro no pueda escaparse, como por ejemplo, un parque para perros. Una vez se tranquilice, oblígale a sentarse. ¿Qué estáis en una zona en la que no puedes soltarle? No tires de la cuerda sino que deja que se acerque sin tirones al perro (siempre explicando la situación al dueño del otro perro para que colabore).

Algo que yo recomiendo siempre para estos perros con problemas de socialización es llevarlos a unas sesiones de socialización con ayuda de un adiestrador. También, si no puedes asumir el coste de estas sesiones, prueba de quedar con gente que tenga perros y ayuda a tu perro a socializarse correctamente. Para ello, tu perro debe sentir que los perros no son una amenaza para él: permite que juegue, que corra, que asocie una actividad física con perros con algo muy agradable. Lo que tu perro necesita es cambiar el chip de su mente. Él ahora siente que los perros son sus enemigos. Hay que trabajar para cambiarle ese chip y que entienda que los perros son excelentes compañeros de juegos con los que poder pasar momentos divertidos y solo tú podrás ayudarle.

Sin embargo, no solo debes tener en cuenta este periodo de socialización y esta reeducación social. También debes llevar a cabo una labor en casa. Los perros que normalmente tienen estos comportamientos antisociales, son perros por lo general dominantes. En sus casas han interiorizado el rol de liderazgo, por lo que una vez que salen fuera de ella, han de comportarse como tales, como líderes dominantes que deben proteger a sus dueños de posibles peligros, como por ejemplo, otros perros.

¿Cómo debes actuar en casa? Evitando humanizar al animal. Sigue las pautas correctas de educación canina y entrena en obediencia básica. Cinco minutos al día en el que trabajar órdenes sencillas como “siéntate”, “dame la pata”, “ven aquí”, etc. te ayudarán a que tu perro interiorice otro tipo de rol, el de pertenencia a una manada, no el de líder de una manada.

¿Qué tu perro es tremendamente dominante? Con problemas de perros muy dominantes, a las pautas que te he explicado anteriormente hay que sumarle la castración, porque hablamos de un problema hormonal que no podemos controlar. En este caso, la testosterona es la responsable de que tu perro sea tan agresivo con otros perros, sobre todo, los machos. Si ese es el caso de tu perro, si ataca sobre todo a machos, plantéate la castración si quieres conseguir resultados eficaces.

Y jamás esperes resultados inmediatos. Así como las personas no cambiamos de un día para otro, no esperes lo mismo de tu perro. No te rindas, trabaja en su socialización y lograrás grandes resultados.

Sandra Ferrer. Creadora del Programa de Educación Canino "Cómo Educar a un Cachorro"