El Bullmastiff es un perro de complexión muy fuerte, un animal poderoso cuyo aspecto, admitámoslo, sirve para disuadir a cualquier persona que quiera entrar en tu casa… Por eso son excelentes guardianes.
De hecho, como es un perro de naturaleza desconfiada y recela de los desconocidos, su mejor trabajo siempre será el de guardia.
No obstante, ¿necesitas un guardián? ¿O necesitas un amigo?
El Bullmastiff no solo recela de los desconocidos, sino que también es increíblemente leal, dócil y familiar. Bien adiestrado es el mejor compañero que puedas querer, protector con los miembros de su familia y muy bueno con los niños. Con ese tamaño hay quienes dudan que pueda estar cerca de los más pequeños, pero nada más lejos de la verdad: son increíblemente tiernos y cuidadosos.
Así como muchos perros toman un líder dentro de la familia, el Bullmastiff tiene facilidad para seguir a todos sus miembros sin distinción, siendo obediente y dócil con todo el mundo. No obstante, ¿cómo se consigue eso? ¿Es fácil?
Bueno, sí y no.
Lo cierto es que el Bullmastiff no es un perro excepcionalmente dominante, así que es fácil de adiestrar. Pero también detecta rápidamente las inconsistencias del adiestramiento, y saca partido en seguida, por una razón muy simple: para proteger a su familia, necesita un líder, y si los humanos no están por la labor… él sí lo estará.
Por tanto, ¿quieres un Bullmastiff feliz, equilibrado, dócil y amoroso? Perfecto. Pero necesitas aplicarte en el adiestramiento: necesitas educarle, demostrarle que eres digno de su confianza y su lealtad, y que puedes ocuparte de la seguridad de la familia. En seguida seguirá tus instrucciones y aprenderá nuevas normas a toda prisa, solo por complacerte y ser un útil miembro en la manada.
Marcos Mendoza
PD: Si quieres saber más sobre el Bullmastiff, te recomiendo una lectura amena y concreta sobre la raza... Como este libro de Simona Salanueva.