Pero este no ha sido el único incidente reciente con animales a bordo de aviones. Un enjambre de abejas fue visto recientemente en un vuelo a Moscú, obligando a los pasajeros aterrorizados a pedir ayuda. También se encontró un murciélago en la cabina de un vuelo de Delta de Wisconsin a Atlanta hace no mucho alarmando a los pasajeros.
Otro caso sorprendente fue el de un pasajero en Bangkok al que se le encontraron varias crías de leopardo, pantera y oso en su maleta. En Tailandia, los leopardos y las panteras se venden a precios altos. Y el último ejemplo que os pongo es el de un mono que fue encontrado en un vuelo desde Florida a Nueva York, pero para al que se le permitió sentarse al lado de su dueño durante el resto del vuelo y se comportó impecablemente durante el mismo, incluso se abrochó el cinturón de seguridad.
¿Conocéis algún caso curioso o gracioso como los que os he contado?