Hola amigos, ¿cómo estáis? Hoy os vamos a dar algunas claves a tener en cuenta a la hora de afrontar una pelea entre perros.
A veces, a pesar de que nuestro perrito esté bien educado y sea tranquilo pueden darse escenarios bastante agresivos que nos resultarán inesperados y donde no sabremos bien qué hacer. Es lo que normalmente vemos en los parques al pasear con nuestro amigo: ladridos, gruñidos, mal genio…, y peleas, tomando en cuenta esto debemos saber que hacer a la hora de afrontar un pelea de perros.
Es muy normal que estas situaciones se produzcan de vez en cuando debido a la jerarquía entre machos, los celos, la territorialidad, etc. Tenemos que tener especial cuidado sobre todo entre dos machos y dos hembras, o perros de la misma dimensión y edad. Cuanta más similitudes haya, más probabilidades habrá de que se produzca un pequeño enfrentamiento entre estos y debamos afrontar un pelea de perros
Cuando se produzca una de estas circunstancias lo más importante es valorar la gravedad. Como todos sabemos existen casos muy graves que incluso llegan a la muerte donde tendremos que actuar de la mejor manera posible. Y otros casos que son poco más que un juego. Por eso, lo más importante es saber que si la pelea conlleva o no riesgos para intervenir.
En la mayor parte de los casos, cuando se produce una pelea entre perros lo frecuente es cogerlos del collar para intentar separarlos. Pero nada más lejos de lo que tenemos que hacer. Este es un error muy usual que no conviene ni al humano ni a los perros y puede agravar las condiciones. Debemos intentar distraerlos y relajarlos de otra manera. Por ejemplo, si los perros son pequeños, podemos dar un grito o producir un sonido fuerte, echarles agua, arrojarles alguna prenda, etc. Lo que nunca debemos hacer es ponernos nerviosos, tirar de su collar, golpearlos o gritar su nombre desesperadamente ya que puede darles más fuerzas.
Si hay dos personas en el momento de la pelea, hay que tirar de las patas traseras de ambos hasta que se relajen. Si estáis solos, tendréis que decidiros por coger a aquel que sea más fuerte o en su caso, vaya ganando la pelea, porque en el momento en el que le cojas las patas traseras jugará con desventaja.
Recordar que la prevención es el remedio a estas peleas. Tener un perrito educado y obediente evita estas situaciones. Aun así, si algún día se produce desgraciadamente una situación del estilo, tened en cuenta estos consejos. ¡Mucha suerte!
Fuente: proyectomascota.com; lineasvet.blogspot.co.uk
Imagen: Trapete/Flickr