1. Haga que su gato se acostumbre a su portador, para ir al veterinario.
Unas semanas antes del día de la visita al veterinario, trate de salir del vehículo con la puerta abierta y un sabroso premio para su gatos en su interior. Asegúrese de que el soporte sea lo suficientemente grande como para que su gato se pueda mover cómodamente dentro. Déjelo descansar en el interior del vehículo y luego que salga cuando quiera. Las experiencias positivas con el portador de antemano puede ayudar y evitar la carrera loca hacia un escondite siempre que aparezca el portador. Considere el uso de un spray calmante, en el portador, al menos 30 minutos antes de su viaje al veterinario.
2. Encontrar un veterinario para gatos “amistoso”.
No siempre es fácil elegir el profesional correcto o más beneficioso. Afortunadamente, algunos profesionales se centran exclusivamente en los gatos. Otros ayudan a reducir el estrés de las visitas mediante el establecimiento de sus oficinas para mantener a los gatos y perros aparte.
3. Alabe a su gato por su trabajo bien hecho
Elogio verbal, golosinas en el portador y suaves caricias contribuirán a tranquilizar a su gato que es amado y está seguro, y sobrevivirá a este viaje importante y necesario.
4. Llegar a la oficina del profesional de animales preparados e informados
Antes de salir, anotar cualquier pregunta o preocupación que usted pueda tener sobre la salud o el comportamiento de su gato para sacar el máximo provecho de su visita.
Entre visita y visita al profesional, dar a su gato, regulares en casa, exámenes para mantenerlo en contacto con lo que está pasando con su cuerpo. Mantenga una lista de preguntas o preocupaciones que le surgen durante estos exámenes por lo que puede preguntar la próxima vez que vea el veterinario.
La entrada Cuatro sugerencias para llevar a su gato al veterinario aparece primero en Can&Cam todo sobre su mascota.