Cuando estés en casa deja a tu perro en una zona restringida pequeña con juguetes para mordisquear para que se entretenga. Una jaula de viaje podría ser el lugar ideal. Una alternativa sería tener a tu mascota agarrada con su correa en un lugar cerca de su cama o atarte su correa a tu cinturón. De esta manera tu perro podrá descansar a tu lado mientras tú lees, trabajas en el ordenador o ves la televisión.
Una vez cada hora dile 'vamos a hacer pis' (o cualquier frase para indicarle que ha llegado la hora de ir al baño) y lleva a tu mascota rápidamente al lugar donde quieres que haga sus necesidades (el patio de casa, el parque más cercano...) Mantente quieto de pie con tu perro de la correa y repitiéndole la frase para que haga sus necesidades. Dale tres minutos para que lo haga.
Cuando tu mascota haga sus necesidades, halágalo con entusiasmo y dale tres trocitos de comida. La mayoría de los cachorros harán pis antes de dos minutos en cada viaje 'al cuarto de baño' y harán caca antes de tres minutos cada dos viajes.
Una vez que tu cachorro se percate de que le premias cada vez que hace sus necesidades en el sitio apropiado, empezará a querer hacerlo siempre allí. Hacerlo en casa simplemente no le reporta los mismos beneficios. Es más, después de muchas repeticiones enseñarás a tu perro a hacer sus necesidades cuando tú se lo dices.
Si no obedece
Si tu perro no hace sus necesidades en esos tres minutos le volveremos a llevar a casa y le meteremos otra vez en su transportín por media hora. El propósito de confinarle en este área restringida es prevenir que cometa 'accidentes' por toda la casa cuando tú estás presente (pero no tienes tiempo de prestarle toda la atención necesaria) y predecir cuando tu perro va a necesitar eliminar.
Confinar temporalmente a tu cachorro en un espacio pequeño inhibe sus ganas de hacer sus necesidades, ya que el perro por naturaleza no querrá ensuciar el lugar donde descansa. Como consecuencia, tu perro sentirá la necesidad de eliminar en cuanto le saquemos de su área restringida. Además, la rapidez en llevarle al sitio indicado hará que se pongan en marcha sus movimientos de vejiga e intestino.
Como eres tú el que está eligiendo el momento de sacar a tu perro, puedes determinar el momento en que hace sus necesidades, y como puedes predecir cuando necesita hacerlo, podrás estar allí para enseñarle donde debe hacerlo y premiarle cuando lo haga. No debes encerrar a tu perro en su jaula de transporte más de una hora. Si está confinado demasiado tiempo le obligarás a 'ensuciar' su jaula y harás muchísimo más difícil la tarea de enseñarle una buena conducta higiénica.
Vamos de paseo
Cuando tu cachorro haya crecido lo suficiente para salir de paseo, asegúrate de que haga sus necesidades antes de pasear en una zona cercana a casa. Si tu perro no elimina en tres minutos, vuelve a llevarlo a casa y déjalo en su jaula y vuelve a intentarlo media hora más tarde. Si tu perro hace sus necesidades acuérdate siempre de halagarlo efusivamente y darle tres trozos de comida como de costumbre y después decirle 'vamos a dar un paseo'.
Estableciendo la regla de 'si no haces tus necesidades no hay paseo' conseguirás que lo haga más rápidamente. Aún mejor, enseñarle a hacer sus necesidades cerca de casa te ayudará a poder dejar allí la bolsita con la que recojas sus heces y no tendrás que ir paseándola por todo el vecindario. Para enseñar a tu perro una buena conducta higiénica necesitarás una jaula de viaje, varios juguetes para mordisquear, unos cuantos trozos de comida y, sobre todo, mucha paciencia.
Fuente de información: Pdtspain.com