El CEO de una compañía canadiense perdió su trabajo luego de que un vídeo en el que se le veía pateando a un cachorro encendiera los pedidos de su salida. Centerplate, la empresa que maneja concesiones de comida en más de 300 estadios y establecimientos deportivos, informó que Desmond Hague renunció a su puesto luego de que la compañía investigara su "conducta incorrecta que incluía el maltrato de un animal bajo su cuidado".
Hague fue filmado por una cámara de seguridad pateando a un perro, un cachorro de Doberman Pincher, y levantando la correa hasta que el perro quedara colgando de su cuello en un elevador en un edificio en Vancouver, en Columbia Británica. La Sociedad para la Defensa de los Animales de la provincia se involucró en el caso luego de la difusión del vídeo.
Una petición en la web de Change.org reunió casi 193.000 firmas.
"Espero que la cachorra Sade esté a salvo y encuentre un hogar donde pueda vivir en paz", escribió Erica Perry, la mujer que posteó la petición. "El abuso a los animales no tiene lugar en nuestra sociedad y espero que esto ayude a desalentar futuros actos de crueldad, porque hay muchos actos terribles que no son captados por una cámara".
"Queremos reiterar que no condonamos y no vamos a dejar pasar el abuso a los animales", dijo Joe O"Donnell, presidente del directorio de Centerplate. Se disculpó por las acciones de Hague y la incomodidad que causó en los "empleados, clientes e invitados", de la compañía.
La semana pasada, Hague emitió un comunicado disculpándose por sus acciones, diciendo que se había sentido frustrado durante el cuidado del perro, que pertenecía a un amigo. "Este incidente no tiene relación con mi personalidad y estoy profundamente avergonzado", dijo.
La compañía inicialmente buscó colocar a Hague en observación, ordenándole que done US$100.000 para
armar una fundación en el nombre del perro para combatir la crueldad animal y a realizar 1.000 horas de servicio comunitario en una organización que trabaje para proteger el bienestar y la seguridad de los animales.
Pero el ruido de los que pedían la salida de Hague fue demasiado fuerte para ser ignorado por la compañía. Muchas de las instalaciones en las que Centerplate posee contratos son de propiedad de entidades públicas como gobiernos locales y universidades. En respuesta a las noticias sobre el vídeo, muchas entidades emitieron comunicados diciendo que estaban evaluando sus contratos con Centerplate.
La compañía colocará a su director de operaciones como CEO.
Fuente: este post proviene de Stop al maltrato animal, donde puedes consultar el contenido original.
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