Es necesario e importante que se tenga toda la información posible acerca del celo de las gatas, así se podrá saber cómo reaccionar cuando esto se genera. Invitamos a seguir leyendo el artículo con el fin de conocer los datos que se necesitan saber.
Antes de comenzar con el tema tendremos que mencionar que las gatas durante el celo tienen un comportamiento que no es el comunión, parecen que se han vuelto como locas. Dentro de los síntomas mas frecuentes encontramos los fuertes maullidos que son usados para atraer a los machos. El período de celo es algo natural en los gatos.
El primer celo de las gatas
Recordemos que el celo es una etapa en la cual la gata se encuentra receptiva sexualmente, esto quiere decir que es el periodo en el cual aceptan a los machos y quieren tenerlos cerca ya que se encuentran ovulando. El fin del celo es la reproducción.
Las gatas empiezan la etapa de la pubertad en una edad bastante temprana, el primer celo se puede dar al llegar a los seis meses, aunque en algunos casos esto se puede retrasar y darse llegando a los nueve meses.
El celo no llega al mismo tiempo en todas las gatas. Esto dependerá, en muchos casos, de la raza. Las gatas que tienen el pelo corto, como las siamesas, pueden tener su primer celo a los cuatro meses. En el caso de las gatas de pelo largo, como las persas, pueden llegar a tener el celo incluso después de su primer año de edad.
Saber la fecha puntual de su primer celo puede ser bastante difícil, esto dependerá de diferentes aspectos. Además de tener en cuenta la raza de deberá evaluar en dónde está viviendo. Para su primer celo tendrá que tener un máximo de números de horas de sol, por eso el celo puede comenzar a darse cuando los días son más largos.
Si en una vivienda hay varias gatas viviendo juntas las mismas podrán tener todas juntas el celo para regular su ciclo sexual. Por eso las gatas pueden tener antes el celo o se podrá retrasar con el fin de adaptarse al resto de las gatas.