En este artículo vamos a enfrentarnos a una grave enfermedad de los peces de acuario llamada hidropesía, por la cual es muy común que fallezcan nuestros peces.
Por suerte se puede detectar a simple vista, lo cual favorece su tratamiento si se aborda antes de que esté muy avanzada, ya que en dado caso no podría curarse.
¿Qué es la hidropesía?
La hidropesía es una enfermedad que se manifiesta en los peces, cuando presentan una retención de líquidos en su cuerpo.
Puede ser causada por una mala alimentación o por contaminación en el agua, afectando sus intestinos o riñones. Por ende el pez se hincha, pierde el apetito y tiene problemas para deponer.
Esta enfermedad puede ser bacteriana o viral, por lo que hay que evitar el contagio a otros peces aislando al afectado en una pecera diferente, misma donde se le aplicará el tratamiento.
Cuando la enfermedad es bacteriana el pez puede curarse con tratamiento, por el contrario, cuando es viral o genética ya no hay nada que hacer.
A continuación conoceremos más a fondo las causas, síntomas y tratamientos de la hidropesía.
Causas de la hidropesía
Existen varias bacterias causantes de la hidropesía en peces. Una de ellas es la Aeromona sp, la cual se encuentra en agua dulce y salobre. Se relaciona con infecciones por: heridas, ingestión de agua o alimentos contaminados.
La bactería Mycobacterium también provoca hidropesía. Este es el hongo causante de la tuberculosis y la lepra, aunque casi no afecta a las especies de sangre fría.
Sin embargo es causante de la Septicemia Hemorrágica, una enfermedad bacteriana, mortal y contagiosa, producto de una infección que inflama diversos órganos y provoca insuficiencias. Entre otras bacterias menos frecuentes, pero latentes.
Concluyendo con el aspecto clínico, la acumulación de estas bacterias dentro del acuario puede ser causada por:
La mala calidad del agua, con exceso de amonio, nitritos y nitratos.
Mala alimentación. Si la comida del pez no se humedece por unos pocos minutos antes de que este la ingiera, puede hincharse dentro de su estómago y obstruir su intestino
Infección de heridas donde puedan asentarse las bacterias nombradas recientemente.
Por genética existen especies que son propensas a padecer de esta enfermedad, como: Guppy, Betta, Pez cebra, Cabeza de león, Telescopios, Kois y Mollys, entre otros.
¿Cómo se puede identificar la hidropesía?
Como hemos mencionado, esta enfermedad presenta síntomas que pueden ser reconocidos a simple vista:
Aletas y escamas erizadas.
Hinchazón anormal del abdomen.
Exoftalmia: Ojos saltones. Muy hinchados o hundidos.
Heces blancas y largas. (Evidencia de que algo está mal en la salud del pez)
Dificultades para flotar. El pez nada de lado, boca abajo o se mantiene muy cerca de la superficie.
Úlceras.
Hemorragias. (Síntoma interno)
Agallas blancas. No confundir con el punto blanco.
El ano sobresale y se enrojece.
Partes caídas en las aletas.
Tratamiento de la hidropesía
La hidropesía puede ser infecciosa o viral. Pero como resulta engorroso para un inexperto identificar a qué tipo de afección nos enfrentamos, se recomienda aislar al pez del resto para evitar el contagio, dejarlo en cuarentena y mantener una constante supervisión de su alimentación, oxígeno, agua, y medicamentos.
Para conocer cómo curar la hidropesía en peces y administrar el tratamiento adecuado, es recomendable la orientación de un veterinario.
Si al momento no se tiene la posibilidad de acudir a un experto, existen algunos tratamientos básicos inmediatos:
Darle de comer guisantes hervidos sin piel
Mantener el acuario de cuarentena limpio
Utilizar sal no-iodada para eliminar líquidos (una cucharada rasa de té por cada 4 litros)
Sin embargo, el veterinario podría recomendar antibióticos (como Metronidazol) y antinflamatorios (como Prednisona).
También medicamentos como la Amoxicilina, que es un potente antibiótico que puede combatir muchas de las enfermedades que padecen los peces. Sirve contra la caída de las aletas, yagas, heridas en la piel, ojo blanquecino, y cuando la hidropesía está avanzada en el pez.
Si el pez se cura de la hidropesía, debe cambiar constantemente el agua de la pecera (al menos un 20% cada 3 días) para eliminar todo residuo de los medicamentos, que a la larga pueda ser contraproducente y agravar la situación del animal.
Consejos para prevenir la hidropesía en los peces de acuario
La hidropesía se puede prevenir con un adecuado mantenimiento del acuario, buena alimentación, agua limpia y productos en cantidades adecuadas. De este modo son bajas las probabilidades de que nuestros peces enfermen.
Se recomienda mantener aislados y monitoreados a los peces nuevos por un tiempo, antes de unirlos al acuario principal, para así descartar cualquier riesgo que porte una enfermedad desde la tienda y contagie al resto.
Si el pez tiene hidropesía, aumentar la temperatura del agua puede ralentizar el desarrollo del padecimiento. No obstante, si el pez presenta dificultades para flotar, o escamas erizadas, significa que ya está en fase terminal, es decir, que no tiene curación.