Las enfermedades de los peces son la gran preocupación, para los aficionados es realmente difícil saber qué tipo de males están atacando a nuestro acuario. Por esta razón y con el fin de evitarnos problemas posteriores, lo mejor es adoptar medidas preventivas.
Lo más importante es saber distinguir entre dolencias que tienen su origen en las condiciones de nuestro acuario y las que proceden de ataques de hongos, parásitos, bacterias o virus.
Para que tu acuario y sus habitantes mantengan un estado saludable no sólo en apariencia, es preciso tener en cuenta las indicaciones que se mostrarán a continuación. De esta forma, presumirás de acuario marino sin que las preocupaciones y los quebraderos de cabeza disuelvan la pasión por tu hobby más preciado.
Paso a paso en el mantenimiento de los peces
* Antes de realizar cualquier otra operación, hay que controlar los valores de pH, dureza, amoniacos, nitritos y vigilar la temperatura del agua.
* Administrar a los peces una dieta variada es uno de los pilares para prevenir muchas enfermedades.
* Efectuar regularmente cambios de agua del acuario teniendo en cuenta que cambiar el agua no es lo mismo que rellenar el agua evaporada.
* Limpieza regular del filtro sin olvidar dejar siempre partes del filtro viejas. No hay que cambiar todas las materias filtrantes, sino que lo más aconsejable es cambiar la mitad y, al próximo cambio, la otra mitad.
* Eliminar las partes muertas de las plantas del acuario, los restos de comida y, por supuesto, algún pez muerto, en el caso de que lo haya.
Si poseemos un acuario enfermería, debemos sacar del principal cualquier animal que denote algún síntoma sospechoso.
Una buena medida es no dejar morir al pez dentro del acuario: cuando veamos que está mal y que no podamos salvarlo, es mejor sacarlo y ponerlo en un acuario pequeño aparte.
* Es imprescindible sifonear el fondo del acuario dos o tres veces al año. No hay que hacer toda la superficie de golpe, sino que primero se realizará una primera mitad y la otra mitad, pasados unos quince días. De esta forma la colonia bacteriana habrá tenido tiempo de restablecerse.
* Es preciso asegurarse de que los objetos que entran en contacto con el agua del acuario están limpios y, si se utilizan en distintos acuarios, no debemos olvidar desinfectarlos.
* Por último, siempre debes estar muy atento al acuario, debido a que el tiempo te enseñará a conocer bien cuando algo no está funcionando.
Enfermedades bacterianas de los peces marinos
* Tuberculosis: tiene como agente causal al Mycobacterium marinum. Los peces infectados muestran varios signos degenerativos: algunos pierden el apetito, se observa un creciente adelgazamiento, ojos saltones, degeneración de la columna vertebral, defecto en las escamas, vientre hundido, aletas deshilachadas y piel ulcerada.
Lo mejor es deshacerse de los peces enfermos, debido a lo difícil que es aplicar algún tratamiento por las diversas cepas existentes, ya que se convertiría en un proceso muy prolongado. La contaminación se produce vía digestiva.
* Hidropesia: sus síntomas son hinchazón o hundimiento de los ojos, ano sobresaliente y enrojecido, cuerpo hinchado y escamas abiertas. Es difícil curar con tratamiento.
* Septisemia: esta enfermedad provoca hemorragias en la piel del pez. Se transporta a través de la sangre y su rapidez impide, por lo general, algún tratamiento.
* Columnaris u hongo de la boca: se manifiesta con manchas grises y blancas en la cabeza, aletas, agallas u otras partes del cuerpo. Es muy peligrosa cuando ataca a las branquias y en algunos casos no se manifiesta externamente. Tiene una propagación rápida.
* Podredumbre de las aletas: comienza por un ligero enturbamiento de las aletas, luego pasan a desintegrarse y se acortan cada vez más, terminando el pez con únicamente la base de sus aletas. Por lo general, el pez es atacado conjuntamente por hongos. Para solucionar este problema se puede aplicar un aumento de temperatura e higiene.
Enfermedades víricas en peces
* Hidropesia: esta enfermedad puede ser causada por bacterias o por virus.
* Lymphocytis: aparece en las aletas y progresivamente se extiende por todo el cuerpo. Se presenta como protuberancias blancas en forma de moras o como hilos de perlas y se confunde muy fácilmente con los hongos.
Generalmente, ataca con mayor frecuencia en la familia de los Anabantidos. No hay un remedio específico, pero lo aconsejable es separar el pez e incluso cortar la parte de la aleta dañada y aplicar una dosis de yodo en la zona afectada.
Además, se debe mantener en observación al resto de los peces durante dos meses, que es más o menos el periodo en el cual se puede manifestarse el virus.
Enfermedades de los peces marinos provocadas por hongos
* Saprolegnia: por lo general las partes afectadas por esta enfermedad parecen estar recubiertas por algodón, atacando piel, agallas, boca, aletas, e incluso, afectando a los ojos.
Si el daño es superficial, se puede curar sin muchas complicaciones, pero si los filamentos han dañado partes internas es más difícil poder controlarlo. Estos daños pueden dar pie a todo tipo de infecciones secundarias.
* Branquimicosis: son hongos que atacan las branquias. Si no se trata oportunamente puede llegar a matar el pez.
Enfermedades de peces creadas por parásitos externos
* Ictioftitiasis: es otra infección localizada en branquias y piel. Está causada por el protozoo Cryptocaryon irritans. Suele estar causada por protozoos formadores de esporas y no se puede curar.
Los agentes causales más comunes son las especies de Henneguya, Plistophora y Glugea. La única infección fúngica conocida en peces es Ichthyosporidium hoferi, un organismo poco difundido que ataca el hígado y los riñones y, más tarde, se extiende por todo el cuerpo.
Su primera apariencia visible es la aparición de quistes marrones por encima de la piel. No hay un tratamiento seguro, por lo que es mejor deshacerse de los peces enfermos, aunque algunos peces infectados pueden asimilar la enfermedad y vivir con ella indefinidamente.
* Oodinium: ésta es probablemente la enfermedad más común en los acuarios marinos llamada también enfermedad del terciopelo.
Se caracteriza por una capa de color blanquecino que se instala en la piel del pez. Observado al microscopio se ve que se trata de multitud de diminutos parásitos unicelulares. Ocasionan daños graves en la piel y las agallas, pudiendo el pez morir por asfixia debido al daño causado en las branquias.
La causa es el Amyloodinium ocellatum, un protozoo que reside en las branquias y superficie corporal, después de un estado de natación libre, donde forma quistes que producen más formas libres. El tratamiento es sulfato de cobre o citrato durante diez días y, si perdura, repetir la operación durante 10 días más.
* Costiasis: ataca a la mucosa del pez. Al comienzo se pueden ver en la piel y en las agallas, en pequeñas zonas cubiertas por un velo gris y, posteriormente, zonas hemorrágicas rojas producidas por un flagelado (Costia necatrix).
Un buen tratamiento es subir la temperatura y airear fuerte. Es un buen remedio junto a un medicamento apropiado.
* Chilodonella: ataca a las agallas y a la piel. Su tratamiento es igual a la Costiasis.
* Trichodiniasis: se comporta como un parásito secundario. Ocasionalmente, aparecen como primera patología. De forma usual, acompaña a la ictioftitiasis (punto blanco). No se ve a simple vista, pero observaremos que los peces afectados adelgazan y respiran aire desde la superficie.
Son muy importantes las medidas de higiene, profilaxis y los cuidados que hay que otorgar al acuario para evitar muchas enfermedades.
No sirve de nada matar los agentes patógenos cuando estos pueden producirse por una mala filtración o un escaso mantenimiento de nuestro acuario.
Igualmente, no es recomendable el abuso de antibióticos y medicamentos en general, ya que, por ejemplo, los antibióticos debilitan a los peces y nos podemos encontrar con peces sanos que contraigan enfermedades al debilitarse.
Si quieres saber más cosas sobre enfermedades, no dudes en seguir leyendo la segunda parte de "Las enfermedades de los peces marinos".
Imagen acuario: Averain / flickr
Imagen dos peces cabeza negra: Jim, the Photographer / flickr
Imagen pez blanco: mark i geo / flickr
Imagen pez azul: scazon / flickr
Imagen peces rayas blancas y negras: Jbangelo / flickr
Imagen cuatro peces: carolineCCB / flickr
Imagen pez rojo y azul: carolineCCB / flickr