¿Es fácil convivir con ellos?
Por lo general es muy sencilla la vida con un galgo, son animales tranquilos y perezosos. La mayoría de ellos duermen una 18 horas al día. Son felices durmiendo todo el día hasta que toca salir a pasear.
Hay que tener en cuenta que son muy frioleros y no son aptos para dormir en un jardín. No tienen mucha grasa corporal ni pelo. Es mejor que vivan en casa socializando con la familia. Prefieren las superficies blandas para dormir, así que intentará adueñarse del sofá. Asegúrate de proporcionarle una cama blanda.
Son perfectos para convivir con niños y con personas mayores. No saltan ni babean y son tranquilos y respetuosos.
La mayoría de los galgos pueden pasar varias horas solos, pasando gran parte del día en su cama. Puedes ir a trabajar con la tranquilidad de no encontrarte la casa destrozada ni al perro con ansiedad por abandono.
También pueden ser educados a base de premios, sin importar la edad. Un buen entrenamiento para empezar es que acudan a la llamada. Es el más sencillo y también el más útil.
Cómo pasear con un galgo
Los galgos no necesitan paseos largos, con 20 minutos tres veces al día es más que suficiente. Por supuesto hay que adaptarse a su edad y estado de salud. Son perros muy tranquilos que prefieren pasar el día tumbados en la cama reservando energía para cuando toque correr. Esto los hace ideales para vivir en un piso en la ciudad.
Hay que tener en cuenta que no suelen atender a la llamada. Es una raza que se orienta por la vista más que otras. Un gato a mucha distancia puede despertar en ellos el deseo de perseguirlo. No mirará posibles peligros (como coches) y antes que te des cuenta estará demasiado lejos. Por eso es muy importante llevarlos siempre atados con una correa fuerte y un collar ancho. No lo sueltes en parques ni en la calle. Busca un lugar cerrado con una valla suficientemente alta. Agradecerá tener algo de libertad para socializar con otros perros.
Como hemos comentado antes, no les gusta mucho el frío. Si vives en una zona fría o lo paseas a horas muy tempranas es mejor que lo abrigues. Puedes ponerle un abrigo o chubasquero especial para perros que lo proteja de la intemperie.
Preparados para adoptar un galgo
Ya conocemos un poco más de los galgos y sus necesidades. Ahora estamos listos para la adopción. No nos tiene que preocupar la edad del animal, ya que son muy sociables y se adaptan a cualquier ambiente con mucha facilidad.
Antes de la adopción definitiva hay un periodo de adaptación. Durante un tiempo convives con el galgo y os conocéis mejor. Una vez se ha adaptado y estáis contentos con él se realiza la adopción definitiva.
En SOS galgos te hacen una entrevista previa donde resolver tus dudas y conocer tu idoneidad y necesidades. También te asesoran durante el periodo de pre-adopción ayudándote en todo lo que puedan.
El trámite de adopción tiene un coste de unos 300. En este importe se incluyen todos los tratamientos sanitarios del perro (vacunación, desparasitación, esterilización…). Por supuesto también llevan el chip reglamentario y todos los papeles administrativos.
La adopción requiere un compromiso para muchos años. Una alternativa por si quieres probar la experiencia o no puedes adoptar es la acogida. Normalmente consiste en alojar en tu casa un perro que tiene ciertas necesidades que no se pueden atender en el refugio. Es una opción muy gratificante ya que eres testigo de la mejoría del animal.
Si ya has tomado la decisión de adoptar un galgo lo mejor que puedes hacer es presentar tu solicitud de adopción.
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