Tomado de BCS Noticias.mx
La Paz, Baja California Sur (BCS).- Asegura que Alejandrina Hernández introdujo un cachorro a una jaula con perros excesivamente bravos, los cuales mordieron y trataron de devorar al pequeño, por lo cual, tras espiar desde su auto por un rato, decidió intervenir y fotografiar a la dueña cuando trataba de hacerlo. Alejandrina buscó explicar lo sucedido, pero en medio de un ataque de monomanía, muestra la señora Hernández, Setroc huyó del sitio fotografiando todo a su alrededor, para después publicar en un muro de Facebook con nombre falso la historia de un hospital de mascotas sangriento.
La versión de Alejandrina Hernández, dueña de la veterinaria, es que el cachorro en cuestión, Jilito, llegó a sus manos luego de que de manera insistente su dueño se lo ofreciera, junto a la hermana hembra del pequeño, Boquis, pues le era imposible mantenerlos. Finalmente decidió tomarlos, los desparasitó y vacunó para después darlos en adopción. A la hembra la adoptaron primero y desde el momento en que fueron separados el pequeño macho no dejó de llorar.
Al día siguiente de la adopción de Boquis, Jilito ya tenía dueño e incluso se pactó una hora para la entrega a su nuevo amo. Ese día, el nuevo dueño de Jilito llegó un poco tarde a la cita, por lo que Alejandrina decidió llevar al cachorro a jugar con los perros de su vecino, un par de canes que no paran de mover la cola y lamerte la mano si te acercas. Cuando trataba de pasar por debajo de la reja de su vecino a Jilito, llegó Setroc gritando ?así te quería agarrar?, y el resto es historia. Después de los momentos de gresca, el propietario de Jilito lo recogió.
Ahora la Veterinaria 4 Molinos se prepara con sus abogados para iniciar una posible denuncia penal por el delito de difamación en contra de Alejandra Cortés, mientras ésta asegura desde Facebook, donde ya suma varios adeptos, que el nosocomio animal es más parecido a un rastro.