Cuando se dirigían hacía el lugar de los sucesos ellos perdieron comunicación y por lo tanto no tenían acceso al servicio GPS que los llevaría hasta el lugar de la tragedia.
Ellos siguieron adelante y se encontraron con este perro que lucia muy desesperado y que corría a gran velocidad.
Los policías decidieron seguirlo y se llevaron una gran sorpresa cuando se dieron cuenta de que este perro solo quería ayudar a su dueño que se encontraba herido.
Este es un ejemplo claro de que los lazos entre los animales y los humanos puede ser muy grande.