En la primera entrada de este blog intenté (de manera humilde confieso que me quedé muy corto) responder la pregunta: ¿Por qué entrenar a un perro? Ahora abordo el tema desde otra perspectiva: ¿Para qué?, ¿Que fin se persigue o en todo caso que es lo que se obtiene como beneficio?
¿Es bueno para el perro?
¿Es bueno para el humano que cuida del perro?
Primero veamos que pasa en el adiestramiento:
Digamos que decides mandar a tu perrito a una escuela, ya la elegiste porque te gustaron las fotos de su página web, fuiste a conocer las instalaciones, te parecieron limpias, los otros perritos se veían contentos ahí, elegiste un sistema en internado o de llevarlo a clase, en fin ya contrataste el servicio y estás listo para empezar.
Aunque cada escuela funciona diferente debemos decir que una en la que tengan a tu perrito más de dos meses para el adiestramiento básico debería ser revisada por ti para verificar que tenga avances, ya que existe poca regulación y es fácil caer en manos de charlatanes. El promedio de duración es de un mes a seis semanas para este tipo de cursos.
Al finalizar el curso te entregan a tu perrito y ahora si, están listos para comenzar a ver resultados. Aquí es donde muchas personas terminan desorientadas y desilusionadas ya que sus expectativas probablemente no se ven cumplidas. Este es un punto conflictivo, donde terminan encendiéndose emociones y no siempre es culpa de los adiestradores, más que en la falta de explicación oportuna de lo que significa el adiestramiento.
¿Cuales son las expectativas del dueño?
Algunas personas esperan ver a su perrito convertido en Lassie o Rin Tin Tin, una especie de perro maravilla, que deje de ensuciar su casa y destruir todo lo que se encuentra, que permanezca inmóvil como un robot apagado cuando no se le necesite pero se reactive en cuanto a la persona le entran ganas de jugar. Que no ladre para nada excepto si alguna persona malvada pretende entrar en la casa. Que se sirva la comida solo desde el refigerador, la caliente en el microondas y no deje la puerta del micro abierta. Que sea capaz de ir al baño, levante la tapa y le descargue. (Lavarse las patas es opcional) Que sea capaz de combatir un ataque armado con la capacidad de un perro super sayayin, y a una orden se convierta en un manso cordero que juegue con todos su amigos y parientes. (Esta bien estoy exagerando... Un poco)
Desafortunadamente casi nada de esto es factible, entonces ¿para que se manda a la escuela?
Lo explicaré paso a paso, si en algún momento no se comprende el proceso les suplico me hagan llegar sus comentarios para tratar de explicarlo mejor.
Lo primero: Se comienza el proceso de adaptación al collar y la correa, los cuales son instrumentos para conseguir algo muy necesario: CONTROL esto no significa maltrato, al contrario el control mediante sistemas operativos permite la corrección de múltiples problemas de conducta sin la necesidad de regaños, golpes o amenazas. El acostumbrar al perrito a usar la correa y el collar durante todos los días del entrenamiento lo hacen ir moderando su paso, actitudes, juego y energías para comenzar a seguir a una persona. Después discutiremos si la teoría del líder de la manada es o no válida, lo cierto es que después de unas semanas uno percibe que el perrito va muy cómodo siguiendo nuestro paso sin adelantarse y sin ponerse a jugar sin control. De esta manera continuamos con los demás comandos que el perrito va aprendiendo en base a repeticiones de los mismos.
Es muy importante señalar cuales son los comandos del adiestramiento:
-Entrar a trabajo
-Caminado junto
-Cambios de dirección al caminar
-Cambios de velocidad al caminar
-Cambios de posición (echado, sentado y de píe)
-Quieto
-Llamado
Y más importante señalar esto: ¡¡El adiestramiento hasta aquí no es capaz de resolver los problemas de conducta normales en un perro!!
¿Entonces que hay que hacer?
Se los platico la siguiente semana