Se acerca San Valentín. Los sentimientos están a flor de piel y para los amantes de los animales a veces las flores puede parecer que se quedan cortas. No sabes qué regalar y piensas en la cara que se le puede quedar a tu pareja al abrir una caja con agujeritos con un cachorrito dentro... ¿Acierto seguro? No. Desde luego que no. Hay muchos peligros para los animales de compañía en estas fechas, y ser ellos un regalo, es el principal.
Debemos recordar que tener una mascota es una gran responsabilidad, una decisión que debemos tomar valorando los pros y los contras, y nadie puede tomarla por nosotros. Un animal no es solo algo bonito, como unas flores o el romántico detalle de unos bombones. Se trata de un ser vivo que implica unas responsabilidades y reporta mucha felicidad. Debe ser voluntad del futuro dueño si quiere ese tipo de alegrías y adoptar el compromiso. Si los dos estáis de acuerdo después de valorar la situación, podéis ir juntos a recoger uno (es aún más íntimo que simplemente regalarlo).
Por otro lado, si ya tienes compañeros de 2,4, o más patas en casa, recuerda tener precaución con los otros obsequios del Día de los Enamorados. Hay diversos tipos de flor que son tóxicas, como los lirios, tulipanes o claveles. Además, estos ramos suelen ir acompañados por paquetes de silice para nutrir la planta y pueden significar problemas para la salud de nuestra mascota si lo ingieren.
Otro recurso en San Valentín es el chocolate. En diversos formatos suele ser el regalo estrella. Este alimento puede ser muy dañino para ellos y debemos tratar de dejarlo siempre fuera de su alcance, al igual que su envoltorio. El alcohol también afecta gravemente a la salud de nuestros animales de compañía, controlemos los derrames y dejarlo accesible tras las celebraciones.
Y tú, ¿Qué planes tienes para este San Valentín?
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Imágenes/Flickr: Sadiehart, Phil Roeder, Kaz Andrew y __MaRiNa__.