¡Hola a todos!
Aquí estamos en un nuevo reto.
Este reto se llama masaje superficial pero no confundas en ningún caso que esto sea un masaje fisioterapéutico.
Primero de todo quiero que seas consciente de que eres responsable de tu cuerpo y el de tu perro y que nunca hagas nada que vaya en contra de su bienestar.
Un masaje superficial no es más que acariciar a tu perro de una manera adecuada.
No queremos acariciarle porque sí, sino que queremos que él disfrute de esas caricias, es decir, vas a respetar siempre su espacio y su tiempo.
El masaje superficial es una parte importante de nuestro Doga, donde profundizamos un poquito más en toda esta técnica.
En este reto lo que te propongo no es que acaricies directamente a tu perro invadiendo de golpe su espacio, sino que te sientes en un lugar de casa tranquilo y simplemente esperes a que tu perro venga a acompañarte.
Si él no viene, no te preocupes, es cuestión de tiempo que él poco a poco se acerque y se queda cerca de ti. Lo más importante es que respetes su espacio y su tiempo, si no lo que ocurrirá es todo lo contrario.
Así que nada, tengas el súperpoder que tengas, sitúate a la altura de tu perro en un lugar tranquilo de casa, y deja y observa cómo reacciona tu perro.
Si él se acerca a ti, puedes comenzar a acariciarle y observar sus distintas reacciones, y si no se acerca no pasa nada, solo debes esperar a que él decida hacerlo.
Debes observar también sus señales. Por ejemplo, si empieza a lamerte cuando le toques una de sus patas, significa que no está del todo a gusto ya sea porque le molesta o porque simplemente no le gusta. En ese caso, para de tocarle ahí y prueba de acariciarle en otro lugar.
Cuéntame cómo ha sido la experiencia y cómo te has sentido.
¡A por ello!
PAT.